|
Mocio, Santo |
Presbítero y Mártir
Martirologio Romano: En Bizancio, san Mocio, presbítero
y mártir. († inc.)
San Mucio era un sacerdote cristiano que fue martirizado en
Constantinopla durante la persecución de Diocleciano, es decir, a inicios
del siglo IV. Su culto data de muy antiguo. Esto
es prácticamente todo lo que sabemos con certeza sobre él,
pues sus «actas» son indudablemente espurias. En ellas se lee
que san Mucio era un elocuente predicador en Anfípolis de
Macedonia. Durante las fiestas de Baco, san Mucio destrozó el
altar del dios y derribó por tierra los ex-votos. La
muchedumbre le habría asesinado ahí mismo, si el procónsul no
le hubiese arrestado. El tribunal le condenó a ser quemado
vivo, pero el santo salió ileso de las llamas, junto
con tres desconocidos, en tanto que el prefecto y los
asistentes perecieron quemados. Entonces, el mártir fue enviado a Heraclea,
donde sufrió la tortura de la rueda; después fue arrojado
a las fieras, pero éstas no le hicieron daño alguno.
Finalmente fue decapitado en Constantinopla.
El carácter novelesco de las
actas no basta para echar por tierra la certeza sobre
la existencia histórica del santo. Su culto antiquísimo está fuera
de toda duda, y es cierto que existió en Constantinopla,
a fines del siglo IV, una iglesia dedicada a San
Mucio, construida tal vez por el emperador Constantino. Además, es
prácticamente cierto que el antiguo martirologio sirio, de la misma
época, menciona al santo, aunque su nombre está transformado en
el de «Máximo», no sabemos por qué. También el Martyrologium
Hieronymianum hace mención de San Mucio. El Nuevo martirologio Romano
ha restituido la fecha a la propia del Sinaxario de
Constantinopla.
|
|
No hay comentarios:
Publicar un comentario