martes, 1 de octubre de 2013

Saturio, Santo


Eremita, Octubre 2
 
Saturio, Santo
Saturio, Santo

Eremita

Martirologio Romano: En Numancia, en la Hispania Cartaginense, san Saturio, eremita (606).

Etimología: Saturio = saturado. Viene de la lengua latina.


San Saturio, fue un noble visigodo del siglo IV, que repartió todos sus bienes entre los pobres y se retiró a a una cueva cercana a la ciudad de Soria, junto al Duero, para meditar y enseñar a quienes a él acudían.

La ermita del santo anacoreta se sostiene espectacularmente sobre una peña abierta por amplia cueva. Frente a la verja de entrada, una vidriera muestra al santo adoctrinando a su discípulo, San Prudencio, quien más tarde fue obispo de Tarazona y canonizó a su maestro. Al fondo se encuentra una espaciosa sala del s. XVIII con bancos de piedra y un busto del santo. Se trata del lugar donde celebraba sus juntas el Cabildo de Heros, Hermandad de labradores sorianos. Más arriba, subiendo por la escalera adyacente, se llega a la cueva de San Miguel, de quien era muy devoto San Saturio y lugar donde según la tradición habitó durante 36 años, y a la derecha, una losa donde se cuenta que se encontraron en 1580 sus reliquias.

Los frescos de la capilla, que reflejan la leyenda saturiana en las paredes y es una antología del anacoretismo primitivo en la cúpula, fueron pintadas por Juan Antonio Zapata, discípulo de Lucas Jordán y de Palomino, que concluyó su obra en 1704.

San Saturio es el patrón de la ciudad de Soria, España, y una figura muy entrañable y querida por los sorianos.


San Saturio, eremita
fecha: 2 de octubre
†: 606 - país: España
canonización: culto local
En Numancia, en la Hispania Cartaginense, san Saturio, eremita.
patronazgo: patrono, muy venerado, de la ciudad de Soria -cercana a la antigua Numancia-, España.
refieren a este santo: San Prudencio de Armentia
oración:
Glorioso confesor y penitencisimo Anacoreta San Saturio, dígnate escuchar benigno la súplica que te dirigimos en nuestras necesidades, confiados en la eficacia de la intercesión ante Dios que te merecieron las oraciones, mortificaciones y virtudes heroicas, que practicaste mientras peregrinabas en esta vida y que alcanzaron la gloria altísima de que gozas en el cielo.
Te pedimos, en primer lugar, que el nombre de Dios sea conocido y honrado en todo el mundo, mediante la santificación de todas las almas y de modo especial de las nuestras, por las que sientes especial predilección. te pedimos también que remedies las necesidades espirituales y temporales de tus devotos y de todos los hijos de tu ciudad. Por ultimo te pedimos que, si es para mayor gloria de Dios y bien de nuestras alamas, nos alcances una protección especial en esta necesidad particular [se presenta la petición]. Amén.

Se ignora casi todo sobre este santo. Tan sólo se conserva su recuerdo en un muy antiguo breviario de Tarazona donde se recopilan distintas oraciones de San Prudencio, obispo que fue de esta sede, y en el que menciona a su maestro eremita. El problema de datar su vida es que también se ignora el tiempo en que vivió su discípulo Prudencio. Sin embargo, hay cierta coincidencia entre los estudiosos de ambos en que hablamos de finales del siglo V o ya entrado el siglo VI, de manera que el eremita sería godo.

Según la leyenda Saturio era un godo que provenía de una familia adinerada. A la muerte de sus padres dio todos sus bienes a los pobres y se retiró a estas cuevas para vivir santamente en oración permanente con Dios y el arcángel San Miguel. Los parecidos con la vida de San Francisco son bastante evidentes. Cuando llevaba treinta años así vio a un joven que pasaba el río y subía hasta aquellos riscos para pedir su bendición y solicitar vivir a su lado. Este joven se llamaba Prudencio. Tras siete años en convivencia mutua Saturio murió y Prudencio, después de enterrarle en la cueva volvió a su lugar, Tarazona, donde su fama le llevó hasta el obispado.

Leyenda carente por completo de verificabilidad histórica, pero es la que se repite a lo largo y ancho de internet; yo la tomé de una página sobre Soria, donde se la cuenta, al menos, con algún sentido crítico. El santo es muy venerado en la ciudad de Soria, y su ermita, una delicia del paisaje del Duero. En la misma página pueden verse imágenes de la famosa ermita.
 

No hay comentarios: