viernes, 4 de octubre de 2013

Angela María Truszkowska, Beata


Fundadora, 10 Octubre
 
Angela María Truszkowska, Beata
Angela María Truszkowska, Beata

Ángela María nació el 16 de mayo de 1825, en Kalisz (Polonia). En el bautismo recibió el nombre de Sofía Camila. Su familia se trasladó a Varsovia en 1837. Desde su infancia demostró una piedad profunda: participaba todos los días en la misa, recibía con frecuencia los sacramentos, realizaba vigilias de oración y visitaba con asiduidad el Santísimo Sacramento: todo esto desarrolló en ella una espiritualidad intensa.

En un viaje que realizó atravesando Alemania, Sofía, iluminada por el Señor, durante un rato de oración en la catedral de Colonia, intuyó su vocación a estar entre los pobres y necesitados y a servir en ellos a Cristo con la oración y el sacrificio. Esta inspiración la llevó a ser miembro de la sociedad de San Vicente de Paúl. Durante el día trabajaba sin descanso por los pobres y por la noche oraba constantemente, buscando la voluntad de Dios en ella. A la edad de 29 años, descubrió su camino: comenzó a buscar y a ayudar a los niños abandonados de los barrios bajos de Varsovia y a los ancianos sin casa. Con la ayuda económica de su padre y el apoyo de su prima Clotilde comenzó a hacerse cargo de seis niños. De esta forma atrajo a muchas voluntarias y floreció el instituto fundado por ella.

Sofía se hizo miembro de la Tercera Orden de san Francisco y tomó el nombre de Ángela. El 21 de noviembre de 1855, ante el icono de María, su prima y ella se consagraron a hacer la voluntad de su Hijo: éste fue el comienzo de la comunidad de las religiosas Felicianas, o de San Félix de Cantalicio. La madre Ángela determinó como ideal de su congregación: que en todo y por todo Dios sea conocido, amado y glorificado. Las religiosas dirigían a las laicas terciarias, instruían a los convertidos, visitaban las prisiones, y administraban también centros sociales rurales. Después del fracaso de la insurrección de 1863, muchos de estos centros se convirtieron en hospitales, donde las religiosas curaban a los heridos.

La comunidad fue suprimida por el gobierno ruso en 1864, pero continuó en secreto bajo la guía espiritual de la fundadora.

A los 44 años, durante su tercer mandato de superiora general, la madre Ángela se tuvo que retirar de la actividad de su congregación a causa de una enfermedad, pero siguió viva su dedicación a las religiosas. Murió después de 30 años de sufrimiento, devorada por el cáncer, el 10 de octubre de 1899, en presencia de las religiosas. Fue beatificada por Juan Pablo II el 18 de abril de 1993.



Beata Ángela María Truszkowska, virgen y fundadora
fecha: 10 de octubre
n.: 1825 - †: 1899 - país: Polonia
otras formas del nombre: Zofia Camilla Truszkowska
canonización: B: Juan Pablo II 18 abr 1993
hagiografía: «Franciscanos para cada día» Fr. G. Ferrini O.F.M.
En Cracovia, en Polonia, beata Ángela María (Sofía Camila) Truszkowska, virgen, que fundó la Congregación Franciscana de San Félix de Cantalicio, para ayudar a niños abandonados, pobres y marginados.

Sofía Camila nació el 16 de mayo de 1825, en Kalisz, Polonia, de padres nobles y acomodados, piadosos cristianos y patriotas. Nacida prematuramente, era de salud frágil. Su familia se trasladó a Varsovia en 1837, y allí ella continuó sus estudios en la Academia de Madame Guérin, donde bajo la influencia del poeta Estanislao Jachowicz creció su preocupación por los pobres. A los dieciséis años sufrió de tuberculosis y debió ir a Suiza para curarse. Allí se despertó más profundamente su amor a Dios y aprendió a orar, según ella misma reconoció. Aprovechando la biblioteca de su padre estudió detenidamente los problemas sociales de la época, sus causas y efectos, aprendizaje que completaba con las informaciones que le daba su padre, juez del tribunal juvenil.

Muy dada a las prácticas de piedad, pensó en ingresar a la Orden de la Visitación, pero su confesor le recomendó seguir asistiendo a su padre enfermo. Viajando por Alemania con su padre, en Colonia sintió una iluminación del Señor que le hizo entender que su destino estaba entre los pobres. Ingresó a la Sociedad de san Vicente de Paúl y repartía su tiempo entre el servicio a los pobres, y la oración para confiarse a la voluntad de Dios. Finalmente, a los 29 años de edad tuvo una visión clara de su misión y comenzó a buscar y ayudar a los niños abandonados de los barrios pobres de Varsovia y a los ancianos sin casa. Con la ayuda financiera de su padre y el apoyo de su prima Clotilde se hizo cargo permanentemente de 6 niños, y este centro comenzó a conocerse como el Instituto de la Señorita Truskowska. La habilidad de Sofía y su dedicación atrajeron muchas voluntarias y devotos amigos influyentes, de modo que la obra del Instituto floreció.

En respuesta al consejo del P. Honorato Kozminski, su confesor y director espiritual, se hizo Terciaria Franciscana y tomó el nombre de Angela; el 21 de noviembre de 1855 ante la imagen de María, ella y su prima se consagraron a hacer la voluntad de Dios. Así comenzó la comunidad de las Hermanas Felicianas.

La Madre Angela fue una mujer de una gran visión de futuro, que supo responder a las necesidades nacientes de su tiempo y tuvo un gran sentido social unido a una profunda oración; es la primera Comunidad activa-contemplativa en la Iglesia. Al ser suprimidas las comunidades religiosas en Polonia, ella logró mantener en secreto su comunidad; al quedar Polonia bajo el control de Austria, pudo reunir a sus religiosas y enviarlas de nuevo por el mundo. Acarició y logró realizar el proyecto del envío a América, donde se difundieron ampliamente, a partir de 1874, cuando envió y bendijo personalmente a las primeras 5 hermanas. A los 44 años, siendo Superiora General por tercera vez, entregó el gobierno de la Congregación, a causa de la sordera y la enfermedad. Pero no se desentendió de ellas, sino que siguió alentándolas con sus escritos y encuentros.

Literalmente devorada por el cáncer, murió el 10 de octubre de 1899. Pero los últimos treinta años de su vida, que podrían haber hecho que fuera olvidada, realmente fueron vida oculta que fecundó su obra en forma admirable. Fue beatificada por SS. Juan Pablo II el 18 de abril de 1993.

No hay comentarios: