|
El derecho a una información correcta y completa: sexo seguro |
15. El SIDA representa un peligro serio para el cual
no hay curación todavía. Los usuarios de preservativos deben ver
garantizados sus derechos éticos y jurídicos a ser informados correcta
y completamente sobre los riesgos de la transmisión sexual de
esta enfermedad y sobre la verdadera efectividad del profiláctico. Dada
la proporción pandémica del SIDA, lo que la Iglesia propone
no es una mera reducción del riesgo (lo que se
transforma en la actualidad en un aumento del riesgo cuando
los riesgos reales de transmisión no se explican al público),
sino más bien una eliminación del riesgo; no una protección
parcial sino una protección absoluta. Decir que se promueve el
“sexo seguro” cuando de hecho lo que se está promoviendo
es el “sexo más seguro”, es decir, el sexo que
es más seguro que si no se usara para nada
el preservativo, es verdaderamente inducir al error; esto está todavía
muy lejos de ser una total protección. Proclamar que es
“técnicamente correcto” decir que el preservativo “ofrece protección” (induciendo a
la gente a pensar que protegen completamente), queriendo decir que,
de hecho, “ofrecen protección parcial”, o “85-90% de protección” o
“protección relativa” es llevar a muchos a su muerte. Subrayar
que el condón “reduce los riesgos”, escondiendo el hecho de
que “no se eliminan los riesgos”, confunde.
La advertencia de
que el condón es “efectivo en la prevención de la
transmisión del VIH y de muchas otras ETS” o de
que “puede reducir el riesgo de su transmisión” (proclamando, quizá
que en algunos países su producción ya ha sido perfeccionada),
cuando lo que se quiere decir es que “hasta un
cierto grado de efectiva prevención del VIH y de algunas
ETS, aunque no es total y no hay evidencia de
que se reduzca el riesgo de infección por VPH”, no
es sólo una falta de respeto a los derechos de
la mujer, es tanto como algo completamente anti-mujer y anti-hombre.
Animar a un “cambio de conducta” a los adolescentes en
los programas de educación sexual, cuando lo que se pretende
es “animarlos a usar el preservativo cuando viven el sexo
antes del matrimonio”, fomentando contemporáneamente el sexo antes del matrimonio,
no sólo destruye la salud reproductiva de los adolescentes, sino
también su salud mental, emocional y espiritual, así como su
vida futura entera.
16. La falsa seguridad generada por las
campañas de “sexo seguro” obstaculiza el derecho a una información
correcta y completa. Las apelaciones de los verdaderos, sinceros consumidores,
así como de los promotores de la salud, especialmente los
promotores de los auténticos derechos de la mujer, llamando a
completar y revelar claramente la información disponible sobre la efectividad
(más bien inefectividad) de los preservativos, ha topado frecuentemente con
oídos sordos, por una u otra razón. Esta llamada está
fundada en el derecho del consumidor a saber las auténticas
características del producto que él o ella están usando, y
más todavía si tales características son relevantes para la vida
y salud del consumidor. El público debe ser informado de
que el condón no garantiza una total protección ni contra
el SIDA ni contra otras ETS. Igual que los cigarrillos
llevan la advertencia de que fumar es peligroso para la
salud del fumador y la de aquellos que están cerca,
quizás también se debería exigir a los preservativos que llevaran
etiquetas de advertencia, en los paquetes, en los mostradores donde
se exponen y en los distribuidores automáticos, de que no
garantizan una total protección contra el VIH/SIDA y ETS o
de que no son seguros.
El Dr. Luis Fernández Cuervo
de El Salvador avanza, incluso, un paso más, aludiendo a
la posibilidad de acciones legales contra cuantos promueven el “sexo
seguro”, de manera parecida a las acciones legales contra las
empresas de tabaco. “Si un fumador habitual contrae cáncer, él
o ella puede denunciar a la empresa de tabaco, reteniéndola
responsable. Así, en los Estados Unidos, se han obtenido suculentos
millones en compensación (¿!). ¡Como si un fumador no supiera,
hace ya más de 50 años, que el tabaco puede
inducir cáncer! Pero si una persona sexualmente promiscua usando el
preservativo enferma con SIDA, no tiene derecho a denunciar al
laboratorio que ha confeccionado el preservativo, ni a los muchos
grupos que promueven el ‘sexo seguro’. Raro, verdaderamente raro”66.
17. La pandemia de VIH/SIDA y ETS sigue creciendo a
pesar de los grandes esfuerzos en reprimir su crecimiento. Tomando
en cuenta los datos aducidos en diferentes estudios y las
experiencias en este campo, la idea de “sexo seguro”, tal
y como la han presentado las campañas del preservativo, se
muestran falsas o al menos dudosas, y deben ser, por
tanto, sometidas a escrupulosa vigilancia. Más aún, puesto que hay
un cierto nivel de peligro, es una responsabilidad grave de
las instituciones nacionales e internacionales, públicas y privadas, así como
también de los medios de comunicación, contribuir a suministrar una
información correcta y completa sobre la existencia de riesgos que
pueden llevar a la gente a la muerte. Ha habido
protestas formales, y éstas van a continuar, para que acaben
las maniobras de ciertos grupos empeñados en ocultar los esfuerzos
de quienes luchan porque la verdad venga a la luz67.
Es cierto que ni siquiera de
los fármacos cabe esperar que sean 100% efectivos o seguros
todo el tiempo para todos y usarlos es aceptable, sin
embargo, a pesar de los riesgos. En estos casos es
derecho del paciente también ser informado no sólo de los
efectos intencionales, sino de los posibles riesgos, efectos colaterales y
otras complicaciones así como, y esto es muy importante, de
las alternativas. En el caso de la prevención del VIH/SIDA,
quienes fomentan el “sexo seguro” deben revelar plenamente los riesgos
del condón y posiblemente describir también las enfermedades que los
usuarios pueden contraer a consecuencia del fallo del preservativo. Muy
importante también es que se presente la solución “alternativa" (que
es realmente la solución “primaria”), 100% efectiva contra la transmisión
sexual de estas enfermedades, sin gastos, sin tensión del carácter
y libertad de la persona: la abstinencia antes del matrimonio
y la fidelidad a la esposa de uno. Para ver
el artículo completo:
Los valores de la familia contra
el sexo seguro;introducción
Críticas sobre el preservativo en las
campañas de prevención del SIDA
Preocupación ante estudios que
indican una posible no total protección del condón
Resumen
del trabajo Scientific Evidence on Condom Effectiveness for Sexually Transmitted
Disease
Fallos del preservativo
Incremento y disminución del
VIH/SIDA
El derecho a una información correcta y
completa: sexo seguro
La Iglesia y la protección real
del VIH/SIDA y ETS 67] Varios grupos han propuesto
o han tomado iniciativas con este fin. Cf., entre otros,
el suplemento al número 3 de la publicación La Lettre
(diciembre de 1995) del grupo Famille et Liberté, sobre política
de prevención de SIDA en Francia, La politique de prevention
du sida en France. regresar
[68] Cf. el
Mensaje para el Día Mundial contra el SIDA, Una palabra
de amor y esperanza para las familias y las personas
afectadas por el terrible mal del Cardenal Javier Lozano Barragán,
Presidente del Pontificio Consejo para la Salud, de 30 de
noviembre de 2003. regresar
|
|
No hay comentarios:
Publicar un comentario