Según Santa Teresa, orar no es otra cosa que tratar muchas veces, a solas, con quien sabemos que nos ama: Dios. Para aprovechar mucho en este camino, no es cuestión de pensar mucho sino de amar mucho...
La oración es un don gratuito que tenemos todos los hombres, es toda una sabiduría del corazón...
Desarrollar la oración es desarrollar la unión con Dios; desarrollar el grado de unión de amistad que vivo con Dios, desde los modos más simples, hasta los niveles más íntimos de amistad, y de la presencia del Amor, hasta la unión más íntima de ser y de vida en una comunión total con la existencia en Dios.
San Juan de la Cruz, en el comienzo del prólogo de Subida al Monte Carmelo, afirma que en la oración se trata de llegar a la divina luz de la unión perfecta del amor de Dios, cual se puede en esta vida....
Necesidad de Orar sin desfallecer
Iniciamos hoy, 18-10-2010 una nueva semana llena de muchos retos hermosos para nosotros y nuestra familia, pero surge una inquietud, tú como cristiano estas orando sin desfallecer?, eres constante en la oración, rezas al levantarte, al acostarte y en cualquier otro momento... respóndele a tú corazón con la meditación de tú actuar y reflexiona si lo que haz hecho hasta este momento lo haces con la fuerza del Espíritu Santo. Ahora bien, cuando inicias tú comunicación con Dios la misma inicia y termina solo pidiendo?, quiero contarte sobre mi experiencia...hace mucho tiempo mi oración consistía primero en pedir a Dios por mis problemas y terminaba pidiendo y la lista de peticiones se hacia inmensa, pedía de forma desmedida, no había control en ese pedir, aunque déjeme aclararle algo...pedir no es malo y en la cantidad que pidas tampoco es malo, pero como se sentiría un padre o una madre donde sus hijos solo lo único que hacen es pedir y son incapaces de reconocer otras cosas que ellos le otorgan, como por ejemplo el amor y dedicación y los padres tal vez necesiten escuchar que sus hijos son agradecidos. De igual manera ocurre con Dios; ante esta situación mi vida tomó otro rumbo al momento de tomar conciencia y comencé a dar Gracias a Dios por cada cosa que me ocurría, todo cambio cuando la oración se convertía solo en una acción de gracias por levantarme hasta acostarme, las acciones de gracias llenaron mi mente y mi corazón, alabando y glorificando su Santo y Bendito nombre, reconociendo de esa forma el poder del altísimo en mi vida y déjeme decirle amigo(a) lector que las demás cosas se dan por añadidura como dicen las Santas Escrituras. Si hoy carecemos de una forma efectiva para guiar nuestra oración, observa y analiza el Padre nuestro, oración modelo donde están inmersos cada uno de los detalles que el gráfico de la mano te muestra..incluye en tus oraciones cada elemento importante para agradar a Dios, busca siempre en las Escrituras la revelación de lo que Dios quiere para sus hijos..ora sin descansar, busca a Dios en esa oración constante y sentirás de él respuesta inmediata y sobre todo la Paz que el mundo ni las cosas del mundo dan. Amén y amén. 
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