lunes, 10 de junio de 2013

Hechos de los Apóstoles

 

   
Los Hechos de los Apóstoles es el nombre de un libro de la Biblia, el quinto del Nuevo Testamento. Algunos Teólogos lo llaman "Hechos del Espíritu Santo" por la gran mención que hace de él.
Probablemente tenga el mismo origen que el del Evangelio según San Lucas, con el que forma lo que se suele llamar el opus lucanum; de hecho el libro en su inicio manifiesta que es un segundo tratado. Sin embargo los textos se separaron antes de que se escribieran los manuscritos que nos han llegado hasta hoy día. Con esta separación se buscaba cultivar el conocimiento de los evangelios como una unidad de archivos sagrados, a los cuales los Hechos servían como una especie de apéndice. Es de un interés y valor históricos únicos: no hay ningún otro libro como éste dentro del Nuevo Testamento.
El libro de los Hechos es la única historia de la Iglesia primitiva, primitiva tanto en el espíritu como en la sustancia; sin él sería imposible tener un cuadro coherente de la Edad Apostólica. Con él, las epístolas paulinas son de un valor histórico incalculable; sin él, permanecerían incomprensiblemente fragmentarias e incompletas, a menudo incluso confundirían.
 
La conversión de Pablo.
El autor escribe con estilo de tratado (Hechos 1:1). Al principio también se conoció con los siguientes nombres: Los Hechos, El evangelio del Espíritu Santo y El evangelio de la resurrección.
No contiene la historia de todos los apóstoles, sino sólo la de Pedro y de Pablo de Tarso. Juan es mencionado sólo tres veces, y todo lo que se cuenta de Santiago (Jacob, Jacobo o Sanct Yago), el hijo de Zebedeo, es su ejecución por Herodes (Hechos 12:1). Al inicio del libro se menciona a los doce, incluyendo a Matías (que sustituyó a Judas Iscariote). También a lo largo del libro se menciona a Bernabé de Chipre, a Marcos (probablemente se trate del primer evangelista), Santiago el «hermano del Señor», entre otros.
 

Autor

La evidencia externa, que es relativamente extensa y temprana, como el fragmento muratoriano (una traducción del siglo VII de un texto griego del siglo II descubierta por Ludovico Antonio Muratori en el XVIII), Ireneo, Tertuliano, Clemente y Orígenes todos apuntan a Lucas, el compañero de Pablo (Filemón 24), quien tal vez estaba con él como médico (Colosenses 4:14).
El mismo libro de Hechos indica que fue escrito por un compañero de Pablo. En Hechos 16:10 el escritor, sin previo aviso, pasa de la tercera persona a la primera: «Pero cuando vio la visión enseguida procuramos avanzar hacia Macedonia» (ver también Hechos 20:5-22, Hechos 21:12-18 y Hechos 27:1-28:16).
La evidencia de la autoría del tercer evangelio también cuenta para los Hechos (se puede comparar Lucas 1:1-4 con Hechos 1:1). Aunque el autor nunca menciona su propio nombre, la tradición de atribuir la autoría a Lucas data por lo menos del segundo cuarto del siglo II.

Datación

La datación mayoritaria (Norman Perrin, E. Lohse, P. Vielhauer, O. Cullman) sitúa a este libro en los años 80, debido a que esta es la década en que se suele fechar el Evangelio según san Lucas, que lo precede. Sin embargo, la horquilla datacional que puede encontrarse en la bibliografía acerca de este tema es muy amplia.
La datación más tardía está limitada por la existencia del papiro P45, de la primera mitad del siglo III y por la mención que la Epistula apostolorum hace de este texto a mediados del siglo II. Autores como E. Schürer o F.C. Burkitt han sugerido que Hechos era posterior a las Antigüedades judías de Flavio Josefo, al señalar posibles dependencias de Hechos con respecto a la obra de Josefo. Esta teoría ha sido rebatida por autores como Adolf von Harnack, F.J. Foackes Jackson, W. Kümmel, G.W.H. Lampe y T.W. Manson.
Algunos autores (B. Reicke, C. Vidal) proponen fechas anteriores al año 70 o incluso al año 62, basándose en los siguientes datos:
  • El libro finaliza bruscamente con el comienzo de la cautividad de Pablo en Roma, hacia el año 60.
  • Aunque relata el martirio del diácono Esteban y del apóstol Santiago el de Zebedeo, no menciona el de Santiago el menor, que tuvo lugar en el año 62 y habría supuesto un argumento importante para retratar a los dirigentes judíos como enemigos del evangelio, exculpando a los romanos, en el mismo tono conciliador que el resto del libro.
  • No menciona la muerte de Pedro en las persecuciones de Nerón, en los años 62-64
  • Tampoco relata la muerte del personaje más prominente del libro, Pablo de Tarso, también como mártir, en los años 60.
  • Presenta a los dirigentes judíos, especialmente a los saduceos, como enemigos, entre los que no se incluye de forma tan clara a los romanos, de modo similar al evangelio de Lucas. Esto no parece coherente con el ambiente de persecución romana contra el cristianismo que se inició con Nerón.
  • Tampoco se menciona, ni directa ni indirectamente, la destrucción del templo de Jerusalén en el año 70, que habría servido para reforzar la imagen de Jesús como hijo de Dios.
  • El principal problema que presenta esta teoría, es que Lucas 21 profetiza la destrucción de Jerusalén. Dado que se supone que la profecía está escrita después finalizar la guerra en el año 70, suele situarse a Lucas después de esta fecha. Sin embargo, autores como C.C. Torrey y C.H. Dodd exponen que Lucas 21 no da ningún detalle histórico de la destrucción de Jerusalén, sino que toma todas las imágenes del Antiguo Testamento (Jeremías 21, Zacarias 12, Zacarias 14, Esdras 9, Salmos 79, Ezequiel 40-48, etc.).

Datos sobre Jesús de Nazaret

El relato resulta historiográficamente menos fiable que otros con respecto a la biografía de Jesús de Nazaret, debido a que es más tardío (posterior al evangelio de San Lucas) y más elaborado desde un punto de vista catequético y para el proceso de creación de la iglesia. Contiene únicamente relatos de la resurrección y algunos dichos atribuidos a Pedro.
Menciona a «Santiago el hermano de Juan» (Hechos 12:2, Hechos 15:13 y siguientes, no se refiere al mismo Santiago), en lo que coincide con las cartas de Pablo.

Temática

CapituloTemas
1(v8)Poder Espiritual
2(v21)Llamado Divino
2(v38)"Buscar a Dios"
8(v22)Arrepentimiento
18(v24)"Conocimineto Espiritual"
25(v27)'Inocencia
27(v24)"Providencia"
28(v31)Reino Espiritual

Simbología

CapituloSimbolo
20(v33)Plata
20(v33)Oro
27(v13)Tempestad
27(v39)Naufragio
28(v2)Fuego
28(v4)Víbora
28(v20)Cadena
28(v8)Fiebre


Véase también

Enlaces externos



Hechos de Los Apóstoles
Autor: La Biblia




En el Prólogo al libro de los HECHOS DE LOS APÓSTOLES, su autor remite expresamente a un "primer Libro" escrito por él mismo, donde se narra lo que hizo y enseñó Jesús desde el comienzo hasta el momento de su Ascensión al cielo (1. 1-2). El Libro a que alude es el tercer Evangelio, y el autor es el evangelista san Lucas, que concibió y compuso estos dos Libros como partes integrantes de una única obra. Sólo hacia el año 150, cuando los cristianos reunieron los cuatro Evangelios en un mismo volumen, estas dos partes quedaron separadas.

Los "hechos" relatados en el Libro muestran cómo los Apóstoles dieron cumplimiento al programa que el Señor resucitado les fijó antes de su partida: "Recibirán la fuerza del Espíritu Santo que descenderá sobre ustedes, y serán mis testigos en Jerusalén, en toda Judea y Samaría, y hasta los confines de la tierra" (1. 8). En el Evangelio de Lucas, el ministerio terreno de Jesús comienza en Nazaret (Lc. 4. 16-21) y culmina en Jerusalén con la Pascua del Señor (Lc. 9. 51). Y es precisamente de Jerusalén, de donde el mismo Lucas hace partir la acción evangelizadora de la Iglesia narrada en el libro de los Hechos.

Para escribir este Libro, Lucas empleó una abundante documentación: las tradiciones de la Iglesia de Jerusalén y de la comunidad de Antioquía, el testimonio personal de Pablo y, en particular, un "diario de viaje" que narraba la actividad misionera del Apóstol, donde el empleo del "nosotros" indica que su autor era un testigo presencial de los acontecimientos. Esto hace que el libro de los Hechos de los Apóstoles sea una fuente de información imprescindible para conocer los primeros tiempos de la Iglesia.

Sin embargo, Lucas no es un simple cronista que pretende escribir la historia completa de los orígenes cristianos, o presentar la penetración del Cristianismo en el mundo pagano como un fenómeno puramente histórico. Su finalidad es poner de manifiesto la acción del Espíritu, que va edificando la Iglesia por medio de la predicación de los Apóstoles y hace fructificar la Palabra de Dios en lugares cada vez más lejanos.
 
 
Tras los cuatro Evangelios, el siguiente escrito del Nuevo testamento es el libro de los Hechos de los Apóstoles. Como ya se ha indicado, esta obra forma una unidad con el Evangelio de Lucas, del que constituye la segunda parte. Así lo prueba: *La dedicatoria de ambos escritos a un tal Teófilo (cf. Lc 1,1-4; Hch 1,1-2). *La alusión al principio de Hechos (Hch 1,1) al primer libro (el Evangelio). *Las semejanzas de estilo y vocabulario que se dan entre ambos. *Los numerosos paralelismos existentes entre uno y otro.
Indice:
• Introducción general
1.- Hechos 1
2.- Hechos 2
3.- Hechos 3
4.- Hechos 4
5.- Hechos 5
6.- Hechos 6
7.- Hechos 7
8.- Hechos 8
9.- Hechos 9
10.- Hechos 10
11.- Hechos 11
12.- Hechos 12
13.- Hechos 13
14.- Hechos 14
15.- Hechos 15
16.- Hechos 16
17.- Hechos 17
18.- Hechos 18
19.- Hechos 19
20.- Hechos 20
21.- Hechos 21
22.- Hechos 22
23.- Hechos 23
24.- Hechos 24
25.- Hechos 25
26.- Hechos 26
27.- Hechos 27
28.- Hechos 28

No hay comentarios: