El santo padre recibió ayer en audiencia privada al gran maestre de la Orden de Malta, fray Matthew Festing, acompañado del cardenal patrono Paolo Sardi y los máximos dirigentes del hospital de la Orden de Malta, San Juan Bautista, en Roma.
Un comunicado de la Orden de Malta informa que, durante el encuentro, el gran maestre ha presentado las actividades de la Orden de Malta, subrayando la antigua tradición de asistencia a los débiles y a los que sufren que siempre ha distinguido su trabajo.
En la audiencia, el papa exhortó a los presentes a continuar con la obra de asistencia del hospital con valentía y esperanza, sentimiento que pidió que se comunique a todos los trabajadores del hospital y de las clínicas y de los centros anti-diabetes. Así mismo, subrayó con fuerza que la crisis de hoy no es tanto económica sino moral. El corte lineal de los recursos es ofensivo para la vida humana y se corre el riesgo de hacer considerar la vida como un simple "objeto de intercambio", explicó el papa Francisco.
Para finalizar, el pontífice animó a considerar al prójimo como carne de Cristo que es "muy difícil de curar" pero que precisamente por esto para nosotros debe ser considerada el desafío moral que vencer.
La directora general del hospital de la Orden de Malta, Tiziana Frittelli, dando las gracias al santo padre por el fuerte apoyo moral que manifiesta hacia la asistencia sanitaria en general y, la católica en particular, recordó el periodo de crisis profunda que la sanidad nacional está atravesando y los esfuerzos necesarios para mantener viva la misión de los hospitales que deben destinar sus recursos humanos, profesionales y económicos a la tutela de los sujetos socialmente más frágiles.
Entre las actividades principales desarrolladas por el hospital San Juan Bautista está la unidad de rehabilitación, especializada en la delicada fase de recuperación de los pacientes como traumas cerebrales en fase de rehabilitación del coma. El gran hospitalario Albrecht Boeselager, también recibido esta mañana en el Vaticano, ha recordado así mismo los otros aspectos de la asistencia médica desarrollada por la Orden de Malta en Italia y en 120 países en el mundo, con particular referencia al cuidado y la protección de la vida en todas sus expresiones.
La Soberana Orden Militar y Hospitalaria de San Juan de Jerusalén de Rodas y de Malta, fue fundada en Jerusalén en torno al año 1048, es un ente primario de derecho internacional y Orden religiosa católica laical. La misión de la Orden y testimoniar la fe y servir a los pobres y los enfermos.
Hoy la Orden de Malta trabaja principalmente en el ámbito de la asistencia médico social y de intervenciones humanitarias, desarrollando su actividad en más de 120 países. La Orden tiene hospitales, centros médicos, ambulatorios, residencias para la tercera edad y discapacitados y centros para enfermos terminales. En muchos países, voluntarios de la Orden prestan primeros auxilios, servicios sociales, e intervienen en acciones humanitarias en emergencias. El Malteser International, la Agencia de ayuda internacional de la Orden, es un cuerpo especial que actúa en primera línea en catástrofes naturales y conflictos bélicos. Desde hace más de 50 años, la Orden, a través de su fundación CIOMAL (Comité Internacional de la Orden de Malta), trabaja activamente en el tratamiento de la lepra, una enfermedad que desgraciadamente sigue afectando a diversas zonas del mundo. La Orden también lleva a cabo diversas actividades en el ámbito de la cultura.
Un comunicado de la Orden de Malta informa que, durante el encuentro, el gran maestre ha presentado las actividades de la Orden de Malta, subrayando la antigua tradición de asistencia a los débiles y a los que sufren que siempre ha distinguido su trabajo.
En la audiencia, el papa exhortó a los presentes a continuar con la obra de asistencia del hospital con valentía y esperanza, sentimiento que pidió que se comunique a todos los trabajadores del hospital y de las clínicas y de los centros anti-diabetes. Así mismo, subrayó con fuerza que la crisis de hoy no es tanto económica sino moral. El corte lineal de los recursos es ofensivo para la vida humana y se corre el riesgo de hacer considerar la vida como un simple "objeto de intercambio", explicó el papa Francisco.
Para finalizar, el pontífice animó a considerar al prójimo como carne de Cristo que es "muy difícil de curar" pero que precisamente por esto para nosotros debe ser considerada el desafío moral que vencer.
La directora general del hospital de la Orden de Malta, Tiziana Frittelli, dando las gracias al santo padre por el fuerte apoyo moral que manifiesta hacia la asistencia sanitaria en general y, la católica en particular, recordó el periodo de crisis profunda que la sanidad nacional está atravesando y los esfuerzos necesarios para mantener viva la misión de los hospitales que deben destinar sus recursos humanos, profesionales y económicos a la tutela de los sujetos socialmente más frágiles.
Entre las actividades principales desarrolladas por el hospital San Juan Bautista está la unidad de rehabilitación, especializada en la delicada fase de recuperación de los pacientes como traumas cerebrales en fase de rehabilitación del coma. El gran hospitalario Albrecht Boeselager, también recibido esta mañana en el Vaticano, ha recordado así mismo los otros aspectos de la asistencia médica desarrollada por la Orden de Malta en Italia y en 120 países en el mundo, con particular referencia al cuidado y la protección de la vida en todas sus expresiones.
La Soberana Orden Militar y Hospitalaria de San Juan de Jerusalén de Rodas y de Malta, fue fundada en Jerusalén en torno al año 1048, es un ente primario de derecho internacional y Orden religiosa católica laical. La misión de la Orden y testimoniar la fe y servir a los pobres y los enfermos.
Hoy la Orden de Malta trabaja principalmente en el ámbito de la asistencia médico social y de intervenciones humanitarias, desarrollando su actividad en más de 120 países. La Orden tiene hospitales, centros médicos, ambulatorios, residencias para la tercera edad y discapacitados y centros para enfermos terminales. En muchos países, voluntarios de la Orden prestan primeros auxilios, servicios sociales, e intervienen en acciones humanitarias en emergencias. El Malteser International, la Agencia de ayuda internacional de la Orden, es un cuerpo especial que actúa en primera línea en catástrofes naturales y conflictos bélicos. Desde hace más de 50 años, la Orden, a través de su fundación CIOMAL (Comité Internacional de la Orden de Malta), trabaja activamente en el tratamiento de la lepra, una enfermedad que desgraciadamente sigue afectando a diversas zonas del mundo. La Orden también lleva a cabo diversas actividades en el ámbito de la cultura.
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