Cuenta la leyenda, que una vez, una serpiente empezó a perseguir a una Luciérnaga.
Ésta huía rápido con miedo, de la feroz depredadora y la serpiente no pensaba desistir.
Huyó un día, y ella no desistía, dos días y nada.....
En el tercer día, ya sin fuerzas, la Luciérnaga paró y dijo a la serpiente;
-Puedo hacerte tres preguntas?
-No acostumbro dar éste precedente a nadie pero como te voy a devorar, puedes preguntar.....
-¿Pertenezco a tu cadena alimenticia?
- No, ¿Yo te hice algún mal?
- No
- Entonces, ¿Porque quieres acabar conmigo?
- Porque no soporto verte brillar.....
*"Deja el amor del mundo y sus dulcedumbres, como sueños de los que uno despierta; arroja tus cuidados, abandona todo pensamiento vano, renuncia a tu cuerpo. Porque vivir de la oración no significa sino enajenarse del mundo visible e invisible. Nada. A no ser el unirme a Ti en la oración de recogimiento. Unos desean la gloria; otros las riquezas. Yo anhelo sólo a Dios y pongo en Ti solamente la esperanza de mi alma devastada por la pasión"
lunes, 7 de noviembre de 2011
La luciernaga y la serpiente
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