Esta novena por la vida y la familia, nos describe la importancia que tiene la familia como base de una sociedad con virtudes y con amor. El Espíritu Santo, si nosotros se lo pedimos y lo cuidamos dentro de nosotros a través de la oración, los sacramentos y de nuestro personal esfuerzo, prepara el terreno de nuestro corazón a través de sus dones, siembra en nosotros las virtudes y ellas producen abundantes frutos.
Una familia logra transformarse a través de las virtudes que encontraremos pidiéndolas al Señor a través de la Virgen, que como buena madre intercederá por nosotros para tener una familia alegre y llena del Espíritu Santo.
Se describen los dones que recibiremos por medio del Espíritu Santo, las virtudes que necesitamos y los frutos de la oración en ésta novena.
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