**
«¿Tenéis sed de soledad absoluta? Sería mejor esperar. La soledad exterior vendrá por sí misma cuando la soledad interior esté establecida. Dios arreglará todo. Sin embargo, no olvidéis que podéis estar solo, en medio del mundo y que podéis igualmente estar sumergidos en la algarabía del mundo aunque estéis encerrados en vuestra celda. Tendréis algo mejor que la soledad exterior si hacéis retiro en vuestro interior, de modo que ningún tumulto exterior pueda distraeros. Orad para que ello os sea otorgado».
“Consejos a los ascetas” de Teófano el Recluso – Editorial Lumen
Link de hoy:
No hay comentarios:
Publicar un comentario