![13. Cuando te sientes solo](https://lh3.googleusercontent.com/blogger_img_proxy/AEn0k_tSd3G9OKrZEUtmimlH9HoF68J6GIdgmqZzlLmkOSkeJBN-gSk2UiNKE-sqAotFlp_ueaohfdDg8W9z5OsgW3e0oglRAo_VzCvNl2rq7KXudTekon-sQLRcx1W6sM1xgsAo5ZI=s0-d) |
Cuando te sientes solo |
Padre, en tus manos pongo mi espíritu Lucas 23,
46
PALABRA DE DIOS
Jesús siempre será en nuestra vida en
mejor de los amigos
Jesús “habiendo amado a los suyos
que estaban en el mundo, los amó hasta el extremo”.
Juan 13,1
“Nadie tiene mayor amor que el que da su
vida por sus amigos” Juan
15, 13
Jesús da consuelo al triste
Jesús comprende nuestra
soledad. El mismo la ha vivido, pues cuando más triste
se encontraba, fue abandonado por todos sus discípulos; y sin
embargo, nos ha dejado un remedio poderoso: “Velad y orad,
para que no caigáis en tentación; que el espíritu está
pronto, pero la carne es débil”. Mateo 26,41
Dios, refugio y fortaleza
de los que esperan en él
“Porque así dice el
Señor: seréis alimentados, en brazos seréis llevados, sobre las rodillas
seréis acariciados. Como aquel a quien su madre consuela, así
yo os consolaré”.
Isaías 66, 12-13
“¿Acaso olvida una
mujer a su niño de pecho, sin compadecerse del hijo
de sus entrañas? Pues aunque ésas llegasen a olvidar, yo
no te olvido. Míralo, en las palmas de mis manos te
tengo tatuada, tus muros están ante mí perpetuamente.” Isaías 49, 15-16
“«No se turbe vuestro corazón. Creéis en Dios: creed también
en mí. En la casa de mi Padre hay muchas
mansiones; si no, os lo habría dicho; porque voy a
prepararos un lugar. Y cuando haya ido y os haya
preparado un lugar, volveré y os tomaré conmigo, para que
donde esté yo estéis también vosotros.” Juan 14, 1-3
“Al
que venga a mi no lo echaré fuera; porque he
bajado del cielo, no para hacer mi voluntad, sino la
voluntad del que me ha enviado. Y esta es la
voluntad del que me ha enviado: Que no pierda nada
de lo que él me ha dado, sino que lo
resucite el último día.” Juan 6, 37-39
Jesús cuida de
nosotros
“Yo soy el buen pastor. El buen pastor da
su vida por las ovejas. Pero el asalariado, que no
es pastor, a quien no pertenecen las ovejas, ve venir
al lobo, abandona las ovejas y huye, y el lobo
hace presa en ellas y las dispersa, porque es asalariado
y no le importan nada las ovejas. Yo soy el buen
pastor; y conozco mis ovejas y las mías me conocen
a mí, como me conoce el Padre y yo conozco
a mi Padre y doy mi vida por las ovejas.” Juan
10, 11-15
Jesús nos quiere con Él
Jesús dijo: “Si alguno
me ama, guardará mi palabra, y mi Padre le amará,
y vendremos a él, y haremos morada en él.” Juan 14,
23
Jesús oro al Padre por nosotros
“Padre, los que tú
me has dado, quiero que donde yo este estén también
conmigo, para que contemplen mi gloria, la que me has
dado, porque me has amado antes de la creación del
mundo.” Juan 17, 24
“Yo les he
dado la gloria que tú me diste, para que sean
uno como nosotros somos uno: yo en ellos y tú
en mí, para que sean perfectamente uno, y el mundo
conozca que tú me has enviado y que los has
amado a ellos como me has amado a mí.” Juan 17,
22-23
“Yo les he dado a conocer tu nombre y
se lo seguiré dando a conocer, para que el amor
con que tú me has amado esté en ellos y
yo en ellos.»” Juan 17, 26
Como cristianos, ¡Pertenecemos a una comunidad!
“Así también el cuerpo no se compone de un
solo miembro, sino de muchos. Si dijera el pie: «Puesto
que no soy mano, yo no soy del cuerpo?» ¿dejaría
de ser parte del cuerpo por eso? Y si el
oído dijera: «Puesto que no soy ojo, no soy del
cuerpo» dejaría de ser parte del cuerpo por eso? Si
todo el cuerpo fuera ojo, ¿dónde quedaría el oído? Y
si fuera todo oído, ¿dónde quedaría el olfato?” 1ª. Corintios 12,
14-17
“Si un miembro sufre, todos los miembros
sufren con él; si un miembro es honrado, todos los
miembros se alegran con él”.” 1ª. Corintios 12, 26
“Todos los
bautizados en Cristo os habéis revestido de Cristo: Ya no
hay judío ni griego; ni esclavo ni libre; ni hombre
ni mujer, ya que todos vosotros sois uno en Cristo
Jesús”. Gálatas 3, 27-28
Jesús con nosotros
Jesús se acerco a sus
discípulos antes de subir al cielo y les dijo: “Yo
estoy con vosotros todos los días hasta el fin del
mundo.” Mateo 28,20
“Quién come mi carne y bebe mi sangre
permanece en mí y yo en él”.
Juan 6, 56
ORACION
Estáte, Señor conmigo
Estáte, Señor conmigo siempre, sin jamás partirte,
y cuando decidas irte, llévame contigo; porque el pensar que
te irás me causa un terrible miedo de si yo sin ti
me quedo, de si tú sin mí te vas. Llévame en tu
compañía donde tu vayas, Jesús, porque bien sé que eres tú la vida
del alma mía; si tu vida no me das yo sé que
vivir no puedo, ni si yo sin ti me quedo, ni si
tú sin mí te vas. Por eso, más que a la
muerte temo, Señor, tu partida, y quiero perder la vida mil veces más
que perderte; pues la inmortal que tú das, sé que alcanzarla no
puedo, cuando yo sin ti me quedo, cuando tú sin mi te
vas. Himno de la Liturgia de las Horas
REFLEXION
“Nadie se sienta sin
familia en este mundo: la Iglesia es casa y familia
de todos, especialmente para cuantos están ‘fatigados y agobiados’.” Catecismo de
la Iglesia Católica, 1658.
“Hacerse discípulo de Jesús es aceptar la
invitación a pertenecer a la familia de Dios, a vivir
en conformidad con su manera de vivir: ”El que cumpla
la voluntad de mi Padre Celestial, éste es mi hermano,
mi hermana y mi madre” (Mateo 10, 37).” Catecismo de la
Iglesia Católica, 2233.
TESTIMONIO DE LOS SANTOS
La solicitud fraterna
de los santos ayuda mucho a nuestra debilidad, pues por
el hecho de estar más íntimamente unidos con Cristo no
dejan de interceder por nosotros ante el Padre. Presentan por
medio del único Mediador entre Dios y los hombres, Cristo
Jesús, los méritos que adquirieron en la tierra. Cf. Catecismo de
la Iglesia Católica, 956.
“No lloréis os seré más útil
después de mi muerte y os ayudaré más eficazmente que
durante mi vida”. Santo Domingo de Guzmán
“Pasaré mi cielo haciendo
el bien sobre la tierra”. Santa Teresita del niño Jesús
|
|
No hay comentarios:
Publicar un comentario