Páginas

miércoles, 31 de agosto de 2011

Las parábolas de Jesús.




PARABOLAS

Etim: Del griego parabola, comparación.

La parábola es una breve comparación basada en una experiencia cotidiana de la vida, cuyo fin es enseñar una verdad espiritual. No son fábulas ni alegorías porque se basan en un hecho o una observación real o por lo menos verosímil.

Jesús utilizó parábolas frecuentemente para enseñar las verdades mas elevadas en una forma que estuviese al alcance de todos. Su enseñanza contrastaba por su sencillez y sus imágenes con el estilo complejo de los antiguos filósofos.

La parábola no diluye lo que es profundo sino que acerca al corazón del mensaje por imágenes que ayudan a comenzar a razonar y nos dan una intuición en la que obra la gracia.

Los doctores judíos también utilizaban parábolas, pero Jesús las llevó a la perfección. Sus parábolas sirven para todos en todos los tiempos.

Jesús, después de enseñar al pueblo en parábolas, continuaba enseñando a los discípulos en privado mas directamente y con mas profundidad de lo que era posible para el pueblo. Así los formaba para después encargarlos de divulgar esas verdades.

Cuando los discípulos le preguntaron por que enseñaba con parábolas, Jesús les respondió:

«Es que a vosotros se os ha dado el conocer los misterios del Reino de los Cielos, pero a ellos no. Porque a quien tiene se le dará y le sobrará; pero a quien no tiene, aun lo que tiene se le quitará. Por eso les hablo en parábolas, porque viendo no ven, y oyendo no oyen ni entienden. En ellos se cumple la profecía de Isaías: "Oír, oiréis, pero no entenderéis, mirar, miraréis, pero no veréis." Mateo 13,11-15.

Usar parábolas es proceder como el padre de familia que "saca de su arca las cosas antiguas y las nuevas".

Parábolas del Nuevo Testamento

MATEO

Los Niños que juegan Mateo 11,16-1
El Sembrador Mateo 13,3-8
La Cizaña Mateo 13,24-30 36-43
Grano de mostaza Mateo 13,31, 3
La Levadura Mateo 13,33
El Tesoro escondido Mateo 13,44
La Perla de gran valor Mateo 13,44, 4
La Red Mateo 13,47, 4
La Oveja perdida Mateo 18,12-1
El Servidor despiadado Mateo 18,23-3
Los Trabajadores en la viña Mateo 20,1-6
El Hijo pródigo Mateo 21,28-3
Los Malvados Mateo 21,33-4
La Gran Cena Mateo 22,1-14
El Banquete Nupcial Mateo 22,1-14
Las Diez Vírgenes Mateo 25,1-13
Los Talentos Mateo 25,14-3

MARCOS

El Sembrador Marcos 4,3-8
La Semilla que crece por si sola Marcos 4,26-29
La Semilla de Mostaza Marcos 4,30-32
Los Viñadores homicidas Marcos 12,1-11

LUCAS

Los niños que juegan Lucas 7:31, 35
Los dos deudores Lucas 7-41-43
El sembrador Lucas 8,5-8
El buen samaritano Lucas 10,25-37
Amigo inoportuno Lucas 11,5-8
Rico insensato Lucas 12,16-21
La higuera estéril Lucas 13,6-9
El grano de mostaza Lucas 13,18, 19
La levadura Lucas 13,20, 21
La gran cena Lucas 14,16-24
La fiesta de matrimonio Lucas 14,16-24
El último lugar en los banquetes Lucas 14,7-11
La torre y la guerra Lucas 14,28-32
La oveja perdida Lucas 15,44
La moneda perdida Lucas 15,8-10
El hijo pródigo Lucas 15,11-32
El Administrador infiel. Lucas 16,1-8
Lázaro y el hombre rico Lucas 16,19-3
El juez injusto Lucas 18,1-8
Fariseo y publicano Lucas 18,9-14
Las Minas Lucas 19,12-27
Los Viñadores homicidas Lucas 20,9-18




Las Parábolas de Jesús
Más que temas de información y formación, las parábolas son guías de meditación, individual o comunitaria, que llevan a la transformación.



El género "parábola"

El término castellano "Parábola" que, lejanamente traduce al hebreo mashal, puede ir del símil al proverbio, enigma, símbolo, seudónimo, motivo, ejemplo, ejemplo, refrán, comparación, adagio, chiste, dicho agudo, cuento corto, misterio, fábula, figura, ficción, alegoría, revelación, argumentación, disculpa, objeción y metáfora.
En otras palabras, el mundo de la parábola bíblica abarca las áreas de la comparación, alegoría, ilustración y ejemplificación.
El Nuevo Testamento es "nuevo" por dar el mensaje definitivo de Dios a la humanidad en Jesús. El mismo es la gran PARÁBOLA DE DIOS en su obra, palabra y vida.

Además, Jesús utilizó la parábola en su enseñanza. Al hacerlo, pretendía despertar:

  • actualizaciones de la verdad de Dios,
  • pistas de reflexión,
  • ilustraciones de una realidad,
  • enseñanzas moralizadoras,
  • compromisos para la vida práctica,
  • y motivaciones para ser, pensar, vivir y obrar.

    La parábola pertenece al mundo de lo sapiencial, es decir: al de la sabiduría de la vida, hecha palabra y modelo. Por ello, no es una norma, costumbre, historia o reporte, sino:
  • un consejo o advertencia qué tomar en cuenta (meditación);
  • una invitación y provocación a buscar respuestas (interpelación)
  • un símbolo por descubrir y con el cual sintonizar (enseñanza).
  • una verdad qué aprender a calibrar y comprobar (aceptación);


    Estudio de las parábolas de Jesús

    Toda lectura de la Sagrada Escritura debe seguir un método para ser provechosa y no sólo pasatiempo. El método que aquí se propone es sencillo y sigue seis pasos:

    1. Texto: leer primeramente el o los testimonios del o de los evangelios;
    2. Contextos: examinar el entorno (antes, después, lenguaje, palabras, frases...);
    3. Análisis: buscar pistas para la reflexión detenida del texto evangélico;
    4. Sentido y mensaje: callar para permitir que el texto motive cambios de actitud;
    5. Entrevista con Dios: formular preguntas directas de Dios a la persona (o comunidad) que pueden ser respondidas privada o públicamente (comunitariamente);
    6. Compromisos: no proponer recetas qué seguir, sino sólo sugerencias que ayuden a enderezar tanto comportamientos como actitudes y acciones.

    Más que temas que dan información y formación, las parábolas son unas guías de meditación, individual o comunitaria, que llevan a la transformación.

    Por ello, cada parábola puede trabajarse en forma de meditación personal o como sesión grupal de estudio, pero orientada al compromiso.


    Las parábolas de Jesús

    El catálogo siguiente de dichos, parábolas, comparaciones, ejemplos y alegorías:

    - propone nuevos títulos para leeerlas con una perspectiva más consciente;
    - sugiere un nuevo enfoque para cada ejeemplo de Jesús;
    - induce al lector a asimilar estos texttos sin más compromiso que buscar el Reino de Dios propuesto por el Maestro;
    - lleva al lector no sólo a leer,, sino a meditar, interiorizar y asimilar sus mensajes.


    INDICE GENERAL

    1. El médico y sus enfermos (Mc 2,17);
    2. El esposo y sus compadres (Mc 2,18-20; Mt 9,15; Jn 3,29-30);
    3. El sastre y el cantinero (Mc 2,21-22);
    4. El hombre fuerte y el ladrón (Mc 3,27);
    5. El sembrador (Mc 4,3-8; Mt 13,3-8; Lc 8,5-8);
    6. El predicador y su auditorio (Mc 4,13-20; Mt 13,18-23; Lc 8,11-15)
    7. El labrador paciente (Mc 4,26-29);
    8. El jardinero confiado (Mc 4,30-32; Mt 13,31-32; Lc 13,18-19);
    9. El hombre limpio (Mc 7,14-23; Mt 15,10-20)
    10. Los discípulos atrevidos (Mc 8,34-38; Mt 16,24-28; Lc 9,23-27)
    11. El niño inocente (Mc 9,35-37; Mt 18,1-5; Lc 9,46-48)
    12. Los primeros y los últimos (Mc 10,31; Mt 19,30; 20,16; ; Lc 13,30)
    13. El mago de los imposibles (Mc 11,22-23; Mt 17,20; 21,21)
    14. Los viñadores perversos (Mc 12,1-11; Mt 21,33-44; Lc 20,9-18);
    15. El hombre doble y equivocado (Mc 12,38-40; Mt 23,6-7; Lc 29,45-47);
    16. El campesino sagaz (Mc 13,28-29; Mt 24,32-34; Lc 21,29-33);
    17. Doña Sal y Doña Luz (Mt 5,13 -14);
    18. El hombre y la vela (Mt 5,15-16);
    19. El enojón y el ofensivo (Mt 5,22)
    20. El donador verdadero (Mt5,23-24)
    21. Los enemigos (Mt 5,25-26; Lc 5,58-59);
    22. El hombre y la lámpara (Mt 6,22-23; Lc 11,34-36);
    23. El trabajador con dos patrones (Mt 6,24; Lc 16,13);
    24. El ciego y el lastimado (Mt 7,3-5; Lc 6,41-42);
    25. El papá cuidadoso (Mt 7,9-11; Lc 11,11-13);
    26. El recolector de fruta (Mt 7,16-20; Lc 6,43-44);
    27. El hombre que supo escoger la entrada (Mt 7,13-14; Lc 13,24);
    28. Los dos albañiles (Mt 7,24-27; Lc 6,47-49);
    29. El patrón con pocos trabajadores (Mt 9,37-38; Lc 10,2)
    30. Los niños y su juego (Mt 11,16-19, Lc 7,31-35);
    31. El hombre y los espíritus dañinos (Mt 12,43; Lc 11,24-26);
    32. El campesino y su enemigo (Mt 13,24-30);
    33. La cocinera sabia (Mt 13,33; Lc 13,20-21);
    34. El arqueólogo emprendedor (Mt 13,44);
    35. El coleccionista arriesgado (Mt 13,47-48);
    36. El pescador (Mt 13,47-48);
    37. El jefe de familia (Mt 13,52);
    38. El guardián (Mt 13,33-37; Lc 12,35-38);
    39. El ciego guía (Mt 15,13-14);
    40. Reyes y súbditos (Mt 17,25-26);
    41. El escandaloso castigado (Mt 18,6-11)
    42. El pastor auténtico (Mt 18,12-14; Lc 15,4-7);
    43. El criado malcriado (Mt 18,23-35);
    44. El rico y el camello (Mt 19,24)
    45. El buen patrón (Mt 20,1-16);
    46. Los hijos desiguales (Mt 21,28-32);
    47. Los invitados a la fiesta (Mt 22,1-10; Lc 14,16-24);
    48. El invitado descuidado (Mt 22,11-13);
    49. El visitante intempestivo (Mt 24,27-28; Lc 17,23-24.37);
    50. El ladrón (Mt 24,43-44; Lc 12,39-40);
    51. El velador atento (Mt 24,45-51; Lc 12,42-46);
    52. Las damas de compañía (Mt 25,1-13);
    53. El prestamista y sus deudores (Mt 25,14-30; Lc 19-12-27);
    54. El buen catador (Lc 5,39)
    55. Los dos deudores (Lc 7,41-43);
    56. El prójimo (Lc 10,30-37);
    57. El vecino molesto (Lc 11,5-8);
    58. El prepotente en acción (Lc 11,21-22)
    59. El rico ambicioso (Lc 12,16-21);
    60. El campesino y el tiempo (Lc 12,54-56);
    61. El patrón y el jardinero (Lc 13,6-9);
    62. El jefe de familia y las visitas inoportunas (Lc 13,24-30; [Cf. Mt 25,10-12]);
    63. Cada invitado en su lugar (Lc 14,7-11);
    64. El constructor y el guerrero (Lc 14,28-32);
    65. La mujer y la moneda (Lc 15,8-10);
    66. ¡Todo un papá! (Lc 15,11-32);
    67. El empleado sagaz (Lc 16,1-8);
    68. El rico y el pobre (Lc 16,19-31);
    69. El asalariado (Lc 17,7-10);
    70. El juez y la viuda (Lc 18,1-8);
    71. El devoto y el hombre común (Lc 18,9-14);
    72. El hombre espiritual (Jn 3,8);
    73. El hombre celeste y el terrestre (Jn 3,31-34)
    74. El vendedor de agua viva (Jn 4,13-14)
    75. Los campesinos y la siega (Jn 4,35-38);
    76. El hijo y el siervo (Jn 8,34-35);
    77. El Señor del pan (Jn 6,35-51);
    78. El caminante (Jn 8,12);
    79. El ganadero y el intruso (Jn 10,1-5);
    80. El guardián y el ladrón (Jn 10,7-10);
    81. El pastor y el boyero (Jn 10,11-14);
    82. El hombre que regaló su vida (Jn 10,17-18);
    83. El vivo y el difunto (Jn 11,25-27);
    84. El caminante (12,24);
    85. El hombre es como el grano (Jn 12,24);
    86. El anfitrión y sus huéspedes (Jn 13,4-15)
    87. El patrón y el sirviente (Jn 13,16; 15,20)
    88. El hombre que se volvió camino (Jn 14,6-7);
    89. El viñador y la vid (Jn 15,1-11);
    90. La mujer que da a luz (Jn 16,21-22)
    91. El joven y el viejo (Jn 21,18-19)

    Las parábolas de Jesús proponen cambios de conducta en forma sutil, sin imposiciones ni la preocupación de gustar o no, de ser aceptadas o rechazadas, de motivar o alejar, de comprometer o de volver cínico a quien las escuche, lea o conozca.

    El lector puede hace sus comentarios personales y sacar motivaciones sencillas:

  • revisando los títulos propuestoos atrás o buscando otros más pertinentes, incisivos y directos que los tradicionales;
  • explicando y comentando cada una de accuerdo a la vida y realidad actuales;
  • personalizando sus mensajes para que llas personas imiten en su propia vida el dinamismo del proyecto de Dios escondido en estos textos;
  • encontrando moralejas y orientaciones pastorales para hoy;
  • y buscando para sí y para los ddemás la interpelación que Jesús hacía a los oyentes judíos de su tiempo.

    La serie propone muchos textos y cada uno debe ser tratado en forma independiente con la misma propuesta: "Haz a los demás lo que esperas recibir de ellos" (Mt 7,12).


    Resumen. Las parábolas de Jesús:

    1. Son un lenguaje en imágenes y un instrumento útil para expresarse, relacionarse e involucrarse en la vida de los demás, como Dios en la nuestra;

    2. Son también una proyección del ser humano, que dice lo que es y quiere, sus metas y aspiraciones, sus logros y fracasos, sus riquezas y debilidades;

    3. Son recursos con que los humanos recrean, trabajan y redimen al mundo en que ha sido colocados;

    4. Son un vehículo para transmitir la verdad de Dios, no como regla, sino con la fluidez y belleza poética de la comparación y el proverbio, el encanto de la motivación, el tino de la sugerencia y el alcance de la provocación que lleva al compromiso.


    Conclusión

    Jesús mismo es la gran PARÁBOLA DE DIOS que nos ha sido dicha no para saber más de Dios, sino para llegar a El; y la Biblia, un lenguaje parabólico que nos permite intuir el misterio del Creador, del hombre y de las relaciones entre ambos.


    Jesús se sirvió de parábolas para comunicar y realizar la salvación, es decir:
    - para dar el mensaje de Dios en lenguajje, acción y sentimientos humanos;
    - para ser comprendido inmediata, directa y concretamente;
    - para mostrar que Dios quiere de verdad al ser humano y se encarna en sus valores y lenguaje, en su cultura y forma de percibir la verdad.


    Recomendaciones

    1. Tener siempre el texto completo de la Biblia
    2. Consultar las citas bíblicas y reflexionar los textos.



  • Las parábolas de Jesús.
    ¿Qué son? ¿Cuándo y por qué motivo las utiliza? ¿Cuántas hay? ¿Dónde se encuentran?

    Las parábolas de Jesús.
    Las parábolas de Jesús.



    ¿Qué son las parábolas?

    Las parábolas son relatos, historias escuetas, claras, sencillas, y su finalidad es transmitir una enseñanza del modo más comprensible y fácil de recordar.

    En todas destaca la pequeñez de los comienzos; y el crecimiento progresivo de este Reino; su fuerza regeneradora para los llamados por Dios a la salvación, que alcanzarán si corresponden a esa vocación.

    Jesús predica utilizando parábolas, es decir, ejemplos vivos, imágenes tomadas de la vida ordinaria, dándoles contenidos ricos y amplios. Después un año de recorrer los caminos de Palestina, predicando el Evangelio del Reino y confirmando su doctrina con innumerables milagros. Muchos creen, otros no. Jesús habla del Reino de Dios con tacto y utiliza parábolas en las que, sin ocultar que está diciendo cosas nuevas incita a los oyentes a interesarse y les advierte: "!quién tenga oídos para oír, que oiga". Entenderán los que tengan un corazón dispuesto a la conversión a Dios con el rechazo del pecado, también en sus formas más sutiles.

    Conozcamos a fondo el contenido de las parábolas:



    La parábola del sembrador.

    La parábola de la cizaña.

    La parábola del grano de mostaza.

    Parábola de la levadura.

    Las parábolas del tesoro escondido y la perla.

    Parábola de la red barredera.

    Parábola de la oveja perdida.

    Parábola de la dragma perdida.

    Parábola del hijo pródigo.

    Parábola de los obreros a la hora undécima.

    Parábola de los invitados a las bodas.

    La cuestión de la herencia.

    La parábola del administrador.

    La higuera estéril.

    La parábola del rico epulón y el pobre Lázaro.

    Parábola del buen samaritano.

    La parábola del fariseo y el publicano.

    Parábola de los dos hijos.

    Parábola de las vírgenes necias y prudentes.

    Parábola de los talentos.

    Parábola del juicio final.

    Parábola del juez injusto.

    Parábola de los viñadores homicidas.


    PARÁBOLAS QUE EXPLÍCITAMENTE RECIBEN ESTE NOMBRE

    PARÁBOLAS QUE RECIBEN EL NOMBRE INDIRECTAMENTE

    PARÁBOLAS QUE SE DETECTAN SOLO PORQUE TIENEN LA FORMA DE PARÁBOLAS



    No hay comentarios:

    Publicar un comentario