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miércoles, 28 de septiembre de 2016

El Santo Evangelio del Día miércoles 28 Septiembre 2016


Miércoles de la vigésima sexta semana del tiempo ordinario

San Wenceslao, San Simón de Rojas,
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Leer el comentario del Evangelio por
Beato John Henry Newman : “Te seguiré adondequiera que vayas.”

Job 9,1-12.14-16.

Job respondió a sus amigos, diciendo:
Sí, yo sé muy bien que es así: ¿cómo un mortal podría tener razón contra Dios?
Si alguien quisiera disputar con él, no podría responderle ni una vez entre mil.
Su corazón es sabio, su fuerza invencible: ¿quién le hizo frente y se puso a salvo?
El arranca las montañas sin que ellas lo sepan y las da vuelta con su furor.
El remueve la tierra de su sitio y se estremecen sus columnas.
El manda al sol que deje de brillar y pone un sello sobre las estrellas.
El solo extiende los cielos y camina sobre las crestas del mar.
El crea la Osa Mayor y el Orión, las Pléyades y las Constelaciones del sur.
El hace cosas grandes e inescrutables, maravillas que no se pueden enumerar.
El pasa junto a mí, y yo no lo veo; sigue de largo, y no lo percibo.
Si arrebata una presa, ¿quién se lo impedirá o quién le preguntará qué es lo que hace?
¡Cuánto menos podría replicarle yo y aducir mis argumentos frente a él!
Aún teniendo razón, no podría responder y debería implorar al que me acusa.
Aunque lo llamara y él me respondiera, no creo que llegue a escucharme.

Salmo 88(87),10bc-11.12-13.14-15.

Yo te invoco, Señor, todo el día,
con las manos tendidas hacia ti.
¿Acaso haces prodigios por los muertos,
o se alzan los difuntos para darte gracias?

¿Se proclama tu amor en el sepulcro,
o tu fidelidad en el reino de la muerte?
¿Se anuncian tus maravillas en las tinieblas,
o tu justicia en la tierra del olvido?

Yo invoco tu ayuda, Señor,
desde temprano te llega mi plegaria:
¿Por qué me rechazas, Señor?
¿Por qué me ocultas tu rostro?




Lucas 9,57-62.

Mientras Jesús y sus discípulos iban caminando, alguien le dijo a Jesús: "¡Te seguiré adonde vayas!".
Jesús le respondió: "Los zorros tienen sus cuevas y las aves del cielo sus nidos, pero el Hijo del hombre no tiene dónde reclinar la cabeza".
Y dijo a otro: "Sígueme". El respondió: "Permíteme que vaya primero a enterrar a mi padre".
Pero Jesús le respondió: "Deja que los muertos entierren a sus muertos; tú ve a anunciar el Reino de Dios".
Otro le dijo: "Te seguiré, Señor, pero permíteme antes despedirme de los míos".
Jesús le respondió: "El que ha puesto la mano en el arado y mira hacia atrás, no sirve para el Reino de Dios".


Extraído de la Biblia: Libro del Pueblo de Dios.



Leer el comentario del Evangelio por :

Beato John Henry Newman (1801-1890), teólogo, fundador del Oratorio en Inglaterra
Meditaciones-Oraciones, Part III, 2,2 « Our Lord refuses sympathy »

“Te seguiré adondequiera que vayas.”

Jesús renunció, en el principio, a María y a José, así como a sus amigos íntimos que le profesaban simpatía. Cuando llegó el tiempo tuvo que renunciar a ellos... Quedémonos unos instantes cerca de María antes de seguir el camino de su Hijo. En una ocasión, Jesús prohibió a alguien que quería seguirle despedirse de los suyos. ¿No fue ésta la manera de actuar con su propia madre?

Oh María, pensamos en tu dolor de madre, causado por la despedida de tu hijo. ¿No es uno de los mayores dolores? ¿Cómo habéis soportado esta primera separación y pasado los primeros días, lejos de él? ¿Cómo habéis podido vivir estos tres años en los que no oímos hablar de ti, hasta el momento de la cruz?

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