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miércoles, 2 de abril de 2014

El bullying y sus heridas de muerte

                              


Tus palabras pueden afectar; tus acciones, perjudicar y tus bromas, destruir…


El bullying  (cuyo significado en español sería acoso, intimidación u hostigamiento), constituye una forma de comportamiento agresivo en el que alguien intencional y repetidamente lesiona o molesta a otro. Puede presentarse bajo tres formas: física, mental y, dados los avances tecnológicos de nuestro tiempo, cibernética.


En efecto, se trata de un fenómeno que, si bien ha existido desde siempre en las relaciones humanas, en estos últimos años ha cobrado mayor notoriedad; tal vez, porque su frecuencia se ha extendido pavorosamente, convirtiéndose en una lamentable práctica “de moda” o porque en el presente, sus víctimas han descubierto que el fin a esta injusta situación está en no ocultarla y tomando valor han decidido denunciarla públicamente.


Especialistas como el psicólogo Daniel Ortiz, director del Departamento de Consejería Estudiantil de Ecomundo, al respecto del tema, indica que las personas acosadas, por lo general, son tímidas, de apariencia frágil, sufren de cierta discapacidad o poseen baja autoestima; características que, obviamente, permiten a los agresores, su fácil y rápida intimidación.


En cuanto al perfil del agresor, habitualmente, presenta alguna disfunción del comportamiento como la excesiva necesidad de sentir superioridad o la ausencia de empatía social, reveladas en la adopción de actitudes hostiles y agresivas hacia los más débiles, tal vez porque así logra forjar una seguridad de la que carece internamente y castiga al mundo por la poca aceptación que él mismo cree no haber recibido del resto, siendo con ello, en el fondo, también víctima de sí mismo.


Lo más dramático de esto es que algunas de las personas agredidas terminan suicidándose; lamentablemente, está pasando alrededor del mundo entero; varios casos de adolescentes acabando con su vida por esta causa ocupan titulares de prensa, día a día. Ante tanto dolor, la sociedad ha tomado conciencia de la gravedad del fenómeno y por ello, desde muchos frentes se impulsan campañas y crean fundaciones que buscan educar para evitar el bullying, y sanar tanto en lo físico como en lo emocional a quienes en su momento lo sufrieron.


Comúnmente, hacemos o escuchamos bromas que nos parecen divertidas, sin advertir que en ese mismo instante se está destruyendo a un ser humano con igual dignidad a la nuestra…. ¿Te has detenido a pensar alguna vez, lo que se puede empezar con una simple palabra?

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