Fundadora, 27 de febrero | |||
Beata Francisca Ana de la Virgen de los Dolores Cirer Carbonell, virgen y fundadora
fecha: 27 de febrero
n.: 1781 - †: 1855 - país: España canonización: B: Juan Pablo II 1 oct 1989 hagiografía: La verdad católica
En el pueblo de Sencelles, en la isla española de Mallorca, beata Francisca Ana de los Dolores de María Cirer Carbonell, virgen, que sin saber leer ni escribir, pero movida por el celo divino, se entregó a obras de apostolado y de caridad, y fundó para ello la Comunidad de Hermanas de la Caridad.
Nacida de la población española de Sencelles, Mallorca, Baleares, en 1781. No se conocen datos de su familia; su nombre era Ana Cirer Carbonell. Desde niña se dedica a las faenas hogareñas. Se deduce que se le inculcó la fe católica, aunque no asistió a la escuela y permaneció iletrada. Fue incomprensible cómo la niña entendió el catecismo; además de que en la adolescencia lo impartió a otros niños quienes, aun sin noción alguna de la pedagogía, entendían a la perfección la doctrina impartida por ella. Participa en la parroquia de su tierra natal en diversas actividades pastorales con jóvenes, y atiende pecadores arrepentidos que acudían a ella en busca de alivio espiritual. Después de fallecer su madre y sus tres hermanos, ingresa como terciaria franciscana (actual orden Franciscana Seglar) en 1798, debido a que su padre no le permite integrarse a la vida religiosa en un convento. Al morir su progenitor (1821) queda sola y desde entonces su vocación hacia Dios se acrecienta y con mayor fervor se entrega a la penitencia, oración y auxilio a los necesitados. Al correr el tiempo y pese a sus 70 años (1851) funda en su casa una comunidad a la que da el nombre de Hermanas de la Caridad, y la dirige con paciencia, afecto y prudencia; desde entonces toma el nombre con el que se le conoce, Francisca Ana de la Virgen de los Dolores. Numerosos coterráneos dan testimonio de su vida ejemplar, además de sus éxtasis y levitaciones, por lo cual le dan el título de la Santa de Sencelles, hasta que fallece en la tierra que la vio nacer, el 27 de febrero de 1855. SS Juan Pablo II la beatifica el 1 de octubre de 1989. |
*"Deja el amor del mundo y sus dulcedumbres, como sueños de los que uno despierta; arroja tus cuidados, abandona todo pensamiento vano, renuncia a tu cuerpo. Porque vivir de la oración no significa sino enajenarse del mundo visible e invisible. Nada. A no ser el unirme a Ti en la oración de recogimiento. Unos desean la gloria; otros las riquezas. Yo anhelo sólo a Dios y pongo en Ti solamente la esperanza de mi alma devastada por la pasión"
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