Esperanza.

Si siempre recordáramos esto no seriamos presa fácil de la depresión, del desanimo, del caer en posturas extremas dentro de la Iglesia al no ser esta del mismo molde que nuestras ideas proponen, que nuestros apetitos buscan.

Si siempre recordáramos esto, seguramente no seriamos desesperados, impacientes, dados a ver el cielo siempre gris.

Si siempre recordáramos esto, realmente habríamos renovado nuestra mente sin dejarnos moldear por el mundo, seriamos cristianos de una sola pieza que no buscan el defecto en todo lo que nos rodea, sino las huellas siempre brillantes y hermosas del Señor en toda su creación.

Si siempre recordáramos esto, seguramente el cristianismo seria mas famoso que la Coca- Cola, y prácticamente habríamos dado a conocer el nombre del Señor alrededor del mundo…

En fin… recordemos siempre esto que nos dice el Señor:

“El plan que tengo para tu futuro esta siempre lleno de esperanzas…”
Jeremias 29:11