*"Deja el amor del mundo y sus dulcedumbres, como sueños de los que uno despierta; arroja tus cuidados, abandona todo pensamiento vano, renuncia a tu cuerpo. Porque vivir de la oración no significa sino enajenarse del mundo visible e invisible. Nada. A no ser el unirme a Ti en la oración de recogimiento. Unos desean la gloria; otros las riquezas. Yo anhelo sólo a Dios y pongo en Ti solamente la esperanza de mi alma devastada por la pasión"
Páginas
▼
jueves, 3 de abril de 2014
Hoy... El Señor No Me Afligirá
Gracias Dios por amarme, tu amor es hermoso y profundo y en ese amor me discípulas para lograr lo mejor en mi.
No hay comentarios:
Publicar un comentario