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viernes, 27 de diciembre de 2013

IGLESIA HOY: Consagración del Estado del Vaticano a San José y a San Miguel Arcángel


Queridos amigos y hermanos del blog: El Santo Padre Francisco comenzó sus actividades públicas esta mañana inaugurando la estatua de San Miguel Arcángel, protector de la Iglesia Universal y patrono del Estado de la Ciudad del Vaticano en la plaza del Gobernatorato.

La escultura, que será colocada en un área de los Jardines Vaticanos cerca del Palacio del Gobernatorato, es una obra monumental comisionada por el Presidente emérito de este dicasterio, el Cardenal Giovanni Lajolo, para celebrar al Arcángel Miguel, defensor principal de la fe y custodio universal de la Iglesia.

Su autor es el artista Giuseppe Antonio Lomuscio, ganador del Concurso Internacional convocado por el mismo Gobernatorato del Estado de la Ciudad del Vaticano, según el juicio autorizado de una Comisión de expertos presidida por el Director de los Museos Vaticanos, el Prof. Antonio Paolucci.

Este monumento, que supera los cinco metros de altura, se configura en un grupo escultórico realizado en bronce con la técnica de la fundición a la cera perdida. El basamento ha sido realizado en travertino romano, ideado también por el artista y caracterizado por la presencia de bajorrelieves en bronce.

Como explicó nuestro Director General, el P. Federico Lombardi, el Santo Padre además de inaugurar este nuevo monumento procedió a la consagración del Estado de la Ciudad del Vaticano a San José y a San Miguel Arcángel. Poco antes del inicio de esta ceremonia llegó el Papa emérito, Benedicto XVI, invitado por el Papa Francisco, quien fue saludado con gran afecto por los presentes y por el personal del Gobernatorato.

Inmediatamente llegó el Papa Francisco quien abrazó con afecto a Benedicto XVI y permanecieron juntos durante toda la ceremonia. Después de un breve saludo del Cardenal Giuseppe Bertello, Presidente del Gobernatorato, y de la intervención del Cardenal Presidente emérito, Giovanni Lajolo, quien ilustró el significado del nuevo monumento y de la fontana dedicada a San José, que fue inaugurada anteriormente, el Santo Padre dirigió unas palabras y sucesivamente rezó dos oraciones de consagración impartiendo, en fin, la bendición apostólica a toda la asamblea.

Entre los presentes se destacan, además de los artistas autores del nuevo monumento (Giuseppe Antonio Lomuscio) y de la fontana (Franco Murer), los benefactores que han sostenido esta realización junto a otros invitados y al personal del Gobernatorato.

Palabras del Papa Francisco

"En los jardines del Vaticano -indicó Francisco-, hay varias obras de arte; esta, que se ha añadido hoy, sin embargo, asume una posición de especial importancia, tanto en la disposición, como en el significado que expresa. No es solo una obra de celebración, sino una invitación a la reflexión y a la oración, que encaja muy bien en el Año de la Fe.
 
Miguel qué significa:¿Quién es como Dios? Es la muestra del primado de Dios, de su trascendencia y poder. Miguel lucha para restaurar la justicia divina; defiende al pueblo de Dios de sus enemigos, y sobre todo del enemigo por excelencia, el diablo. Y san Miguel vence porque en él es Dios quien actúa.
 
Esta escultura nos recuerda entonces que el mal ha sido vencido... En el camino y en las pruebas de la vida no estamos solos, estamos acompañados y apoyados por los ángeles de Dios, que ofrecen, por así decirlo, sus alas para ayudarnos a superar muchos peligros, para ser capaces de volar alto en comparación con aquellas realidades que pueden hacer que nuestra vida sea pesada o que nos arrastren hacia abajo. En la consagración del Estado de la Ciudad del Vaticano pedimos a san Miguel Arcángel que nos defienda del mal y lo eché afuera".

"Queridos hermanos y hermanas -prosiguió Francisco-, consagramos también el Estado de la Ciudad del Vaticano a san José, el custodio de Jesús y de la Sagrada Familia. Su presencia nos vuelva aún más fuertes y corajosos  para darle espacio a Dios en nuestra vida, para vencer siempre el mal con el bien".

Cuando inició la consagración a san José le dijo: “Bajo tu mirada benévola y sabia ponemos hoy con renovada confianza, a los obispos y sacerdotes, a las personas consagradas y a los fieles laicos que trabajan y viven en el Vaticano: cuida su vocación y enriquécela de todas las virtudes necesarias”.

En la consagración a san Miguel, el santo padre le pidió: “Vela por esta Ciudad y por la Sede Apostólica, corazón y centro de la catolicidad, para que viva en la fidelidad al evangelio y en el ejercicio de la caridad heroica”.

Y le imploró también: “Desenmascara las insidias del demonio y del espíritu del mundo. Vuélvenos victoriosos contra las tentaciones del poder, de la riqueza y de la sensualidad”.

Luego rezó: “Se tú el baluarte contra todo tipo de maquinación que amenaza la serenidad de la Iglesia; se tú el centinela de nuestros pensamientos, que libra del asedio de la mentalidad mundana; sé tú nuestro paladín espiritual”.

Y con el hisopo roció con agua bendita el nuevo monumento, para luego impartir su bendición a los presentes.
 





 
 
 
 
 
 
 
 
Oración a San Miguel Arcángel
 
San Miguel Arcángel, defiéndenos en la batalla.
Sé nuestro amparo contra la perversidad
y asechanzas del demonio.
Reprímale Dios, pedimos suplicantes,
y tú, Príncipe de la milicia celestial,
arroja al infierno con el divino poder a Satanás
y a los otros espíritus malignos que andan dispersos
por el mundo para la perdición de las almas. Amén.


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