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Tomás de Villanueva, Santo |
Obispo
Martirologio Romano: En Valencia, de España, santo Tomás de Villanueva,
obispo, que, siendo religioso de la Orden de Ermitaños de
San Agustín, aceptó por obediencia el episcopado, sobresaliendo, entre otras
virtudes pastorales, por un encendido amor hacia los pobres hasta
entregarles todos los bienes, incluida la propia cama (1555).
Tomás García Martínez, más conocido como Santo
Tomás de Villanueva (* Fuenllana, Ciudad Real, 1488 - †
Valencia, 9 de septiembre de 1555), predicador, escritor ascético y
religioso agustino español.
Nació en Fuenllana,se educó y creció en Villanueva
de los Infantes, provincia de Ciudad Real, donde sus padres
poseían una rica hacienda, pese a lo cual muchas veces
el muchacho andaba desnudo porque había dado sus vestidos a
los pobres. Queda en pie parte de la casa original,
con un escudo en la esquina, al lado de un
oratorio de la familia.
Aunque hizo estudios de Artes y Teología
en la Universidad de Alcalá de Henares, ingresó en la
Orden de los Agustinos de Salamanca (1516) y en 1518
fue ordenado sacerdote; en la orden ocupó los cargos de
prior conventual, visitador géneral y prior provincial de Andalucía y
Castilla. También fue profesor de la universidad y consejero y
confesor de Carlos I de España.
Gozó de fama por su
gran austeridad personal (llegó a vender el jergón donde dormía
para dar el dinero a los pobres) y por su
ejercicio continuo e infatigable de la caridad, especialmente con los
huérfanos, con las doncellas pobres y sin dote y con
los enfermos. Poseía, sin embargo, una concepción inteligente de la
piedad, de forma que aunque era muy limosnero procuraba solucionar
definitiva y estructuralmente la pobreza mediante la redención activa de
la misma, dando trabajo a los pobres, y así hacía
fructificar sus limosnas: «La limosna no sólo es dar, sino
sacar de la necesidad al que la padece y librarla
de ella cuando fuere posible.», escribió.
En 1533 envió como Provincial
a los primeros padres agustinos que llegaron a México. Empezó
a tener éxtasis místicos en misa o cuando rezaba los
salmos.
Carlos I le había ofrecido el cargo de arzobispo de
Granada pero él nunca lo había aceptado; se cuenta que
llegó a arzobispo de Valencia el 10 de octubre de
1544 por error de un escribano, pero siguió negándose hasta
que se lo ordenó su superior en la orden. Allí,
ayudado por su obispo auxiliar Juan Segriá, puso orden en
una diócesis que hacía un siglo que no tenía gobierno
pastoral directo. Organizó un colegio especial para los moriscos conversos
y organizó en especial un plan eficaz de asistencia y
auxilio social y de caridad.
Compuso bellos sermones, entre los que
destaca Sermón del amor de Dios, una de las grandes
manifestaciones de la oratoria sagrada del XVI. Tuvo, en efecto,
una gran fama de predicador, en un estilo sobrio y
sencillo. Carlos I, al oírle predicar, exclamó: «Este Monseñor conmueve
hasta las piedras», y provocaba sonoras conversiones. Algunos de sus
sermones arremeten contra la crueldad de la fiesta de los
toros. Tuvo asimismo una gran devoción por la Virgen María,
cuyo corazón comparó a la zarza ardiente, que nunca se
consumía. Es autor de varios Opúsculos, dentro de los que
se incluye el Soliloquio entre Dios y el alma, en
torno a la comunión.
En 1547 ordenó sacerdote al futuro San
Luis Beltrán [1]. Falleció por una angina de pecho en
1555 a los sesenta y seis años. Fue canonizado por
el papa Alejandro VII el 1 de noviembre de 1658.
Francisco de Quevedo escribió una biografía suya. Sus obras completas
fueron editadas en Manila en 1881, Opera omnia, seis vols.
Es
el Santo Patrón de la prestigiosa Universidad de Villanova, Pennsylvania,
Estados Unidos de América establecida por los Agustinos en 1842,
y de la Universidad de Santo Tomas de Villanueva en
La Habana, Cuba. Esta fue cerrada por el gobierno Cubano
en 1961, tras la expulsion de los Agustinos, considerados enemigos
de la Revolucion por sus quejas frequentes contra el gobierno.
Los Agustinos exiliados establecerion University of St. Thomas en Miami
Gardens, Florida en 1961.
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