¿Cómo reaccionan los hijos tras conocer que sus padres van a separarse o divorciarse?
Un estudio especializado en familia constata que dos tercios de los jóvenes de 14 a 22 años con padres separados o divorciados han visto afectados sus exámenes; uno de cada ocho redujo el estrés a base de bebida y estupefacientes; y un tercio afirma que alguno de sus padres les puso en contra del otro.
¿Cómo reaccionan los hijos tras conocer que sus padres van a separarse o divorciarse? ¿Cuáles son las consecuencias para ellos tras la ruptura de sus progenitores? La respuesta a estas preguntas viene de la mano de un estudio llevado a cabo por la organización británica 'Resolution', experta en temas que afectan a los derechos de la familia.
En su informe "Exam results 'suffering' as a result of parental break-up" ("Los resultados de los exámenes 'sufren' a causa de la ruptura familiar"), Resolution viene a constatar que jóvenes de 14 a 22 años que han pasado por un proceso de ruptura de sus padres reconocen una caída del rendimiento académico y, al mismo tiempo, un abuso del consumo de alcohol y drogas para reducir el estrés que esta situación les provoca.
Dos de cada tres, peores resultados
Así, la casi dos tercios de ellos (65%) aseguran que los resultados de los exámenes a nivel académico en general se vieron afectados de forma negativa, mientras que un 44% de aquellos encuadrados en los A-Levels (el equivalente a 'excelente') también vieron descender sus notas.
Al mismo tiempo, casi uno de cada cinco (19%) reconocieron no haber obtenido los resultados de los exámenes que estaban esperando. Por otra parte, el 15% señaló que tuvo que cambiar de escuela como consecuencia de la ruptura de sus progenitores, con lo que las notas se vieron también afectadas.
Alcohol y drogas como 'escape'
Los jóvenes con padres separados o divorciados reconocieron en las encuestas que esa ruptura les había ocasionado un estrés emocional que les llevó a cambios en sus hábitos alimenticios y a consumir en exceso tanto alcohol como drogas.
En ese sentido, el 14% aseguró que empezaron a beber por vez primera alcohol o a consumir más que antes, mientras que casi tres de cada diez (28%) señalaron que empezaron a comer más o menos que anteriormente.
Igualmente preocupante, sino más, fue que el 13% admitió la experimentación con drogas o el plantearse experimentar con ellas como resultado de la separación o divorcio de sus padres.
Implicados en la ruptura
Otra cuestión preocupante de las conclusiones del informe hace referencia a que muchos adolescentes y adultos jóvenes se habían sentido implicados por sus padres en el proceso de ruptura.
Así, un 32% de los encuestados dijo que uno de los padres había tratado de ponerles en contra del otro. Y más de uno de cada 4 (27%) aseguraron que sus padres les habían tratado de involucrar directamente en el conflicto.
El mal uso de las redes sociales
Al mismo tiempo, las redes sociales fueron también el escenario donde los hijos se vieron negativamente afectados por las diferencias y ruptura entre sus padres.
Casi una cuarta parte (23%) manifestó haberse enterado por las redes sociales de que uno de sus progenitores tenía una nueva pareja. Y uno de cada cinco (20%) aseguró que sus padres les habían avergonzado o alterado como consecuencia de la publicación de algo acerca de su separación o divorcio.
Otra cuestión que afecta a los jóvenes tras la separación o divorcio de sus padres es que un 19% asegura haber perdido completamente el contacto con uno o más de sus abuelos.
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