*"Deja el amor del mundo y sus dulcedumbres, como sueños de los que uno despierta; arroja tus cuidados, abandona todo pensamiento vano, renuncia a tu cuerpo. Porque vivir de la oración no significa sino enajenarse del mundo visible e invisible. Nada. A no ser el unirme a Ti en la oración de recogimiento. Unos desean la gloria; otros las riquezas. Yo anhelo sólo a Dios y pongo en Ti solamente la esperanza de mi alma devastada por la pasión"
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martes, 31 de diciembre de 2013
Doce Brindis para Fin de Año. ¡Feliz 2014!
1. Inicia el nuevo año como si, de verdad, fuese el último de tu vida: deja atrás lo que no merece la pena e intenta, con todas tus fuerzas, ser una persona totalmente diferente. ¡Ten fe y cultívala!
2. No dejes de soñar ni de trabajar por aquellos objetivos que pueden ser positivos para ti y buenos para los demás. Es bueno tener ideales ¡Pide, con fe, tu progreso espiritual y material al Señor!
3. No dejes de lado a Dios. Él te dará luz en los 12 meses que ahora se inician, palabra oportuna en los 365 días que te aguardan, esperanza en todas y cada una de sus horas. ¡Imprime, un poco de tu fe, a cada una de tus jornadas!
4. Disfruta con intensidad, pero con sentido común, tu existencia. No te dejes llevar por cualquier oferta que degrade tu dignidad como persona ¡Confía, con fe, tus proyectos al Señor!
5. Demuestra no para que se vea, pero sí para que se denote, tu vida cristiana, tu generosidad. No olvides a los que se encuentran materialmente en difíciles circunstancias ¡Porque tienes fe, que seas generoso!
6. Piensa que, la vida, es demasiado breve para malgastarla. Recapacita en aquellos fallos que cometiste en tu pasado y, mirando al cielo, intenta solucionarlos ¡Con fe humilde, pídele al Señor su perdón!
7. No digas “no es posible, de repente, cambiar de la noche a la mañana”. Con la ayuda de Dios y con tu oración, podrás alcanzar pequeñas metas que hagan realidad el superarte en diversos aspectos ¡Confía tus problemas al que te puede aconsejar: a Dios!
8. No seas negativo. Da la cara y lucha en los próximos meses. Utiliza, en esa batalla, las armas del perdón, del amor, de la alegría y de la paciencia ¡Que la fe sea tu resorte!
9. No seas iluso. No sigas ni creas a aquellos que, por variados intereses, intentan alejar a Dios de todo ámbito social: tú tienes que dar testimonio de su presencia ¡Que tu fe sea audible y visible!
10. No te creas un “don nadie” ni tampoco un “don poderoso”. Eres grande por ser hijo de Dios y, eres débil, por ser humano. Intenta conocer un poco más tu fe. Asómate a la Palabra de Dios ¡Acércate un poco más a la Sagrada Escritura, fuente de la fe!
11. Da gracias a Dios por este nuevo año que pone a tu alcance. Lo hace para que seas santo, más sabio y, sobre todo, para que no le olvides ¡Con fe entusiasta, da gracias a Dios!
12. Levanta la copa de la fe con la ayuda y la protección de la Virgen María. Que Ella te ayude a saborear, poco a poco, todo lo que el Señor quiere y espera de ti ¡Pídele a María una fe, por lo menos, tan sencilla y valiente como la de Ella!
¡Feliz Año 2014!
El Abecedario Cristiano
Alaba a Dios en cada circunstancia de la vida.
Busca la excelencia, no la perfección.
Cuenta tus bendiciones en vez de sumar tus penas.
Devuelve todo lo que tomes prestado.
Encomienda a tres personas cada día.
Fíate de Dios de todo corazón y no confíes en tu propia inteligencia.
Gózate con los que se gozan y llora con los que lloran.
Haz nuevos amigos, pero aprecia a los que ya tienes.
Invita a Cristo a ser tu Señor y salvador.
Jamás pierdas una oportunidad de expresar amor.
Lee el evangelio y ora cada día.
Mantente alerta a las necesidades de tu prójimo.
No culpes a los demás por tus infortunios.
Olvida las ofensas y perdona así como Dios te perdona.
Promete todo lo que quieras, pero cumple todo lo que prometes.
Que se te conozca como una persona en quien se puede confiar.
Reconoce que no eres infalible y discúlpate por tus errores.
Sé la persona más amable y entusiasta que conoces.
Trata a todos como quieras que te traten.
Únete al ejército de agradecidos.
Vístete de misericordia, humildad y paciencia.
Y no te olvides de soportar a los demás como a ti te soportan.
Záfate de las garras seductoras de Satanás.
Busca la excelencia, no la perfección.
Cuenta tus bendiciones en vez de sumar tus penas.
Devuelve todo lo que tomes prestado.
Encomienda a tres personas cada día.
Fíate de Dios de todo corazón y no confíes en tu propia inteligencia.
Gózate con los que se gozan y llora con los que lloran.
Haz nuevos amigos, pero aprecia a los que ya tienes.
Invita a Cristo a ser tu Señor y salvador.
Jamás pierdas una oportunidad de expresar amor.
Lee el evangelio y ora cada día.
Mantente alerta a las necesidades de tu prójimo.
No culpes a los demás por tus infortunios.
Olvida las ofensas y perdona así como Dios te perdona.
Promete todo lo que quieras, pero cumple todo lo que prometes.
Que se te conozca como una persona en quien se puede confiar.
Reconoce que no eres infalible y discúlpate por tus errores.
Sé la persona más amable y entusiasta que conoces.
Trata a todos como quieras que te traten.
Únete al ejército de agradecidos.
Vístete de misericordia, humildad y paciencia.
Y no te olvides de soportar a los demás como a ti te soportan.
Záfate de las garras seductoras de Satanás.
Oración del estudiante compuesta por Santo Tomás de Aquino
Oh Dios, fuente de la sabiduría,
principio supremo de todas las cosas.
Derrama tu luz en mi
inteligencia
y aleja de ella las tinieblas
del pecado y de la ignorancia.
Concédeme penetración para entender,
memoria para retener, método para aprender,
lucidez para interpretar y expresarme.
Ayuda el comienzo de mi trabajo,
dirige su progreso, corona su fin,
por Cristo nuestro
Señor.
Amén.
¡¡Feliz año nuevo 2014!!
Las viejas costumbres dicen que para tener un año próspero debemos seguir algunas tradiciones típicas del lugar donde nos encontremos cuando el reloj marque las 12:00 de la noche, por ejemplo: para que no llores debes tomar agua, para el amor y el dinero debes colocarte ropa interior amarilla o roja, debes contar dinero para que no te falte todo el año, debes salir de tu casa con una maleta si deseas viajar. Para alejar las enfermedades debes usar ropa blanca y comer las famosas doce uvas para que te vaya bien cada mes.
El paso a un año nuevo es el momento en que florecen en todas las culturas las supersticiones y los ritos para atraer la suerte y conjurar su destino. Es el mito del eterno retorno de la esperanza en un nuevo comienzo. Las personas piensan que haciendo todas estas cosas su vida cambiará y mejorará.
Uno puede poner su confianza en todas éstas ceremonias, sin embargo, estas creencias, supersticiones, fueron creadas por el ser humano y no tienen absolutamente nada que ver con la realidad, porque si estas acostumbrado a realizar algunas de estas práctica y te fue bien, puede ocurrir que un año sucedan situaciones confusas y graves que no esperabas, entonces qué pasará con tu amuleto, al que tanto estabas aferrado?… la mayor parte de la humanidad pone su confianza en lugares equivocados.
Este nuevo año no lo empieces confiando en la suerte, en un amuleto, o creencias humanas… sino que agradece a Dios por las bendiciones recibidas, a pesar de las diferentes y duras pruebas que hayas atravesado,estas te servirán para comenzar un nuevo año con más ánimo y fortaleza.
Es mi deseo que comiences el 2014, junto a tu familia dando gracias a Dios por todos esos proyectos y anhelos, que si están dentro de Su voluntad, ten por seguro que se harán realidad.
«Confía en el Señor con todo tu corazón, y no te apoyes en tu propio entendimiento» Proverbios 3:5
ORACIÓN DE FIN DE AÑO 2013
Señor, el año se acaba, pasó como un relámpago, pero como todo destello tu luz iluminó mis oscuridades, y al ver brillar tu gracia no me queda más que darte profundamente las gracias.
Como siempre, Señor, hiciste maravillas: me conservaste la vida, me inundaste de detalles en los que pude sentirme tan amada, aunque algunos de tus detalles me hicieron llorar.
Señor este año fue duro, difícil y cansado. Este año fue bello, feliz y lleno de amor…¿qué he de reclamarte? ¿de qué he de quejarme? Quizá Tú tendrás muchas quejas de mi: no te he sido fiel, pequé tantas veces… te fallé tantas más…. Lloriquié por todo, sin embargo, solo me encontré con tu misericordia, solo me topé con tu perdón. Este año, Señor, he vivido colgada de tu manto, porque si algo he aprendido en esta vida es que si me suelto de ti, nada soy.
Viene otro año, y te pido y te agradezco, como siempre por mi familia, mis hijos, mis hermanos, a los que cada día apretadamente, vehementemente, intensamente pongo en tu Corazón, y cuando digo hijos y hermanos hablo de toda esa familia que es mía porque Tú me los diste y nos unen lazos de sangre, no importa si los tengo cerca o si están lejos. Todos están ahí.
También los que son hermanos porque son tus hijos, son mis amigos, esta familia extensa como lo es tu amor están también en mi corazón, cada uno me ha dado un motivo para crecer, para ser feliz, para amar…. Todo esto viene de tu gracia y de tu mucha bondad. El cariño ha crecido con la convivencia, con la diaria conversación, con la oración que hacemos unos por otros. Porque nos unimos en la Eucaristía… es decir, en tu presencia.
Ahora, no quiero ser tan egoísta de no encargarte una vez más a todos aquellos que se han encomendado a mis pobres oraciones: los enfermos, los abandonados, los cansados y deprimidos, los perseguidos y apresados, los que viven los horrores de la guerra y el terrorismo, los inocentes niños abortados, abusados, secuestrados, te pido por sus padres, y toda esa estructura de muerte que machaca cada día queriendo imponer el mal como un bien. Por los sufridos y pobres que nada tienen pero pero son los que más dan.
También te pido por la Iglesia, por el Papa, los obispos…… todos, y no solo por la Iglesia sino por todos los que te aman con sincero corazón y los que sin conocerte te buscan con afán y realizan tus obras. Por los gobiernos del mundo, por los que tienen poder para que sepan mejorarlo todo.
Tú eres, Señor el dueño de la vida, del tiempo y de todos los hombres que llegan y se van de este mundo… En tus manos, en tu corazón descansa el universo, ¿qué temor puedo tener? Todo es tuyo y una vez más te digo con todo mi amor: En tu amor entrego las alegrías y tristezas que este nuevo año traiga consigo…. Pero….. eso sí….. Señor…..no me abandones. No nos abandones. Amén.
HOY ES NOCHE VIEJA
Hoy es Noche vieja
Deseo dormir en paz la última noche del año y despertar con el alma renovada para emprender la nueva jornada de este año que comienza.
Se fue un año más.
Al final del año es conveniente hacer un balance de los 365 días, para ver qué se hizo con ese año de vida. Conviene también saldar todas las deudas que se tienen con Dios y con los demás.
Quiero asomarme a la ventana de mi casa y mirar hacia atrás, hacia ese largo camino que he recorrido durante todo el año.
Si algo puedo ver, es que cada día de ese año transcurrido estuvo lleno del amor de Dios. Estoy en deuda con Él; por eso mi primera palabra al final del año es: ¡Gracias!.
Pero, al lado de tantas bondades de ese Dios, está la triste historia de la ingratitud y la mediocridad para con ese gran amigo. Por eso la segunda palabra tiene que ser: "¡Perdóname todos los errores, todas las mediocridades!. ¡Yo sé que me perdonas!"
Pero hay una tercera palabra que quiero decir: "Te pido un gran año para hacer con el una gran tarea, ayúdame a que este año que empieza sea mejor, que valga la pena vivir. Conviértelo en un gran año. Que aquello de "próspero año nuevo" no se quede en una ironía, sino en una verdad.
También quiero, al final del año, saldar cuentas con mi prójimo, quiero sacar de mi espíritu, arrancar, tirar todos los rencores, odios, resentimientos hacia mis hermanos. Quiero terminar el año bien con todos. Quiero poder decir que no tengo malos sentimientos hacia ningún ser humano.
Es hora de pedir perdón a todos los que en el camino he herido, molestado, desairado. A los que tenían derecho a esperar una respuesta y no se la di, a los que necesitaban una palabra de aliento y me quedé con ella. A los que encontré tirados en el camino de la vida, desesperados, tristes, vacíos de Dios y de ilusión, y pasé de largo porque tenía mucha prisa. Quiero pedirles perdón.
Deseo dormir en paz la última noche del año y despertar con el alma renovada para emprender la nueva jornada de este año que comienza.
Es importante recordar que este año será lo que cada uno haga con él. ¿Será el mejor o será el peor? ¿Será uno de tantos, ni bueno ni malo, sino todo lo contrario? De cada uno de nosotros depende.
Dios que te da ese año nuevo es el que más ardientemente te dice: ¡FELIZ AÑO!
Al Dios que me dio la vida, ¡gracias!.
Al Dios de mis días felices, ¡gracias!.
Al Amor de mis amores, ¡gracias!.
Puesto que al final de la vida me examinarán del amor, perdóname por no haber amado lo suficiente, y concédeme morir de amor.
ORACIÓN DE FIN DE AÑO
Oración para el fin del año
Señor, Dios, dueño del tiempo y de la eternidad, tuyo es el hoy y el mañana, el pasado y el futuro. Al terminar este año quiero darte gracias por todo aquello que recibí de Ti.
Gracias por la vida y el amor, por las flores, el aire y el sol, por la alegría y el dolor, por cuanto fue posible y por lo que no pudo ser.
Te ofrezco cuanto hice en este año, el trabajo que pude realizar y las cosas que pasaron por mis manos y lo que con ellas pude construir.
Te presento a las personas que a lo largo de estos meses amé, las amistades nuevas y los antiguos amores, los más cercanos a mí y los que estén más lejos, los que me dieron su mano y aquellos a los que pude ayudar, con los que compartí la vida, el trabajo, el dolor y la alegría.
Pero también, Señor hoy quiero pedirte perdón, perdón por el tiempo perdido, por el dinero mal gastado, por la palabra inútil y el amor desperdiciado. Perdón por las obras vacías y por el trabajo mal hecho, y perdón por vivir sin entusiasmo.
También por la oración que poco a poco fui aplazando y que hasta ahora vengo a presentarte. Por todos mis olvidos, descuidos y silencios nuevamente te pido perdón.
En los próximos días iniciaremos un nuevo año y detengo mi vida ante el nuevo calendario aún sin estrenar y te presento estos días que sólo Tú sabes si llegaré a vivirlos.
Hoy te pido para mí y los míos la paz y la alegría, la fuerza y la prudencia, la claridad y la sabiduría.
Quiero vivir cada día con optimismo y bondad llevando a todas partes un corazón lleno de comprensión y paz.
Cierra Tú mis oídos a toda falsedad y mis labios a palabras mentirosas, egoístas, mordaces o hirientes.
Abre en cambio mi ser a todo lo que es bueno que mi espíritu se llene sólo de bendiciones y las derrame a mi paso.
Cólmame de bondad y de alegría para que, cuantos conviven conmigo o se acerquen a mí encuentren en mi vida un poquito de Ti.
Danos un año feliz y enséñanos a repartir felicidad.
Amén
EL CIRCULO
EL CIRCULO
Un importante señor gritó al director de su empresa porque estaba enojado en ese momento.
El director llegó a su casa y gritó a su esposa, acusándola de que estaba gastando demasiado, porque había un abundante almuerzo en la mesa.
Su esposa gritó a la empleada porque rompió un plato.
La empleada dio un puntapié al perro porque la hizo tropezar.
El perro salió corriendo y mordió a una señora que pasaba por la vereda, porque estaba obstaculizando su salida por la puerta.
Esa señora fue al hospital para ponerse la vacuna y que le curaran la herida, y gritó al joven médico porque le dolió la vacuna al ser aplicada.
El joven médico llegó a su casa y gritó a su madre, porque la comida no era de su agrado.
Su madre, tolerante y un manantial de amor y perdón, acarició sus cabellos diciéndole:
-"Hijo querido, prometo que mañana haré tu comida favorita.
Tú trabajas mucho, estás cansado y precisas una buena noche de sueño. Voy a cambiar las sábanas de tu cama por otras bien limpias y perfumadas, para que puedas descansar en paz.
Mañana te sentirás mejor".
Bendijo a su hijo y abandonó la habitación, dejándolo solo con sus pensamientos...
En ese momento, se interrumpió el CÍRCULO DEL ODIO, porque chocó con la TOLERANCIA, la DULZURA, el PERDÓN y el AMOR.
Si tu eres de los que ingresaron en un CÍRCULO DE ODIO, acuérdate que puedes romperlo con TOLERANCIA, DULZURA, PERDÓN Y AMOR, ASÍ COMO JESÚS NOS LO ENSEÑÓ.
2013,UN AÑO EXTRAORDINARIO EN LA VIDA DE LA IGLESIA
2013, un año extraordinario en la vida de la Iglesia. | |||
Entrevista de Alessando Gisotti al Padre Federico Lombardi, director de la Oficina de Prensa de la Santa Sede | |||
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LA MEJOR ORACIÓN PARA COMENZAR EL AÑO NUEVO 2014
LA MEJOR ORACIÓN PARA COMENZAR
EL AÑO NUEVO 2014
Escoge el lugar más tranquilo de tu casa y coloca la imagen de Cristo y de la Virgen María; también consigue un ramo de flores y una veladora por cada persona que esté presente. Una vez reunidos todos comenzaras a repetir la siguiente oración para empezar el año nuevo:
Señor,
Primeramente te quiero dar gracias por el año que pasó.
Gracias por cada bendición,
Por cada lección,
Y por cada experiencia.
Gracias por tu cuidado durante los momentos difíciles
Y por las tantas veces que pude reír y gozar con mi familia y amigos.
Quiero dedicarte este nuevo año.
Quiero poner cada día en tus manos y someterlos a tu voluntad.
Que cada esfuerzo, cada paso,
Cada meta y cada aspiración de mi parte sean para la gloria tuya.
Continua guiándome en mi caminar contigo.
Ayúdame a crecer espiritualmente y así poder conocerte mejor.
Dame la oportunidad de pasar más tiempo con mi familia y mis amigos.
Que juntos podamos crecer en amor y ser de apoyo el uno para el otro.
Ayúdame a reconocer la necesidad de evangelizar a las personas en mí alrededor.
Dame las palabras y el respaldo del Espíritu Santo para poder compartir tu amor con otros.
Bendice a mi iglesia, a mis pastores y a mis hermanos en la fe.
Úsanos para alcanzar a nuestra comunidad y brillar tu luz en cada rincón de nuestra ciudad.
Te dedico mi trabajo, mis talentos y habilidades.
Mi salud y la de mis seres queridos están en tus manos.
Señor, dame de tu fuerza y sabiduría para vivir cada día mejor.
Mi deseo es adorarte y exaltar tu nombre.
Mis días son tuyos y me alegro en confiar que tú estarás conmigo en este nuevo año.
En el nombre de Jesús, amen.
Hoy... Responderé Al Llamado del Señor
En Camino Estrecho Y Tortuoso
Lo que te Deseo para el Nuevo Año 2014
Que nuestra amistad continúe eterna y tenga siempre un lugar especial en nuestro corazón.
Que las lágrimas sean pocas, y compartidas. Que las alegrías estén siempre presentes y sean festejadas y recordadas tanto por ti como por mí.
Que Dios esté siempre con su mano extendida y te sostenga y me sostenga señalándonos el camino correcto.
Que los sentimientos como la envidia o el desamor, sean eliminados de nuestra vida.
Que la verdad siempre esté por encima de todo. Que el perdón y la comprensión, superen las amarguras y las dificultades.
Que todo lo que soñemos se transforme en realidad, pero sobre todo que el amor al prójimo sea nuestra meta absoluta.
Que mi cariño deje una huella imborrable tanto en tu vida como en tu corazón.
¡Te deseo un hermoso año nuevo a partir de hoy!
Que nuestra próxima jornada de los siguientes 365 días esté llena de caminos por recorrer y de metas por alcanzar, pero lo más importante es que atesoremos los recuerdos gratos que la vida nos regaló este año que está por terminar.
Lucas 6:38 Dad y se os dará...