viernes, 14 de noviembre de 2014

¿Qué representó el Sínodo para la familia cristiana?



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Sabemos que Dios sólo sabe dar cosas buenas a la familia Mt 7:11 Pues si ustedes, que son malos, saben dar cosas buenas a sus hijos, ¡cuánto más dará el Padre del cielo cosas buenas a los que se las pidan! Reunió a sus obispos para tratar lo relacionado con la familia en el mundo. La familia y la iglesia enfrentan a una cultura del mundo que cada vez se hace más incompatible 1Jn 2:15 No amen al mundo ni lo que hay en él: quien ama al mundo no posee el amor del Padre.
La nueva evangelización es la respuesta a ésta cultura afirma Ricardo Blazques en su libro: “Del Vaticano II a la nueva evangelización”.
No hay duda que la conclusión del Sínodo de los obispos va a tener un movimiento importante para la familia, la intensificación de programas y formación se verá pronto reflejada dentro de la iglesia. Un punto a favor es que las familias cristianas poco a poco van aceptando la formación de sus pequeños en lo que respecta a los sacramentos de la iniciación.
Un paso importante entonces será consolidad en los cimientos fincados en los sacramentos de la iniciación cristiana (bautismo, confirmación y eucaristía). Recordemos la gracia sacramental que desprende cada uno de ellos y claro que actúan eficientemente. Sí bien la gracia sacramental es importante a ello se une la gracia santificante que Dios da en abundancia Col 1:6 el cual está dando fruto y creciendo en todo el mundo, lo mismo que entre ustedes, desde el día que oyeron hablar y conocieron de verdad la gracia de Dios.
La iglesia al responder con el Sínodo de los obispos para tratar lo referente a la familia nos hace sentir que está en nuestro tiempo, en nuestro espacio y quiere ser parte fundamental en el desarrollo de la familia: al igual que nuestro Señor Jesús que indica lo que contamina al hombre y lo refleja cuando sale de él cfr. Mt 15, 11, así de la familia los frutos que dará serán buenos o malos según el cuidado de sus miembros.
La familia enfrenta una cultura que muchas veces se ve que desprecia la religión. ¿Cómo hacer atrayente a Cristo para los jóvenes?, no es una mercancía Cristo, no es una aspirina, no es una alternativa más entre muchas. Es directo: Cristo lo es todo pero el joven y la familia lo tenemos que redescubrir. Del Sínodo esperamos mucho trabajo para los agentes, pero también oramos para que sus padres de familia e integrantes acepten el anuncio. Las buenas nuevas de Dios siempre actual y constante.
Dios necesitó una familia para proyectarnos la salvación, para habitar entre nosotros cfr. 1, 14. Ahora ¿cómo podemos asimilar esa verdad?; Cristo es hoy, mañana y siempre, por tal verdad sabe qué hacer en la familia para sacarla de ese abismo tenebroso de las culturas desafiantes para la fe. Los miembros de muchas familias quieren someter todo a la razón y cuando esta razón no es capaz de salvar al hombre de sus estructuras, buscan más y más estando tan parejo el piso.
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Esperamos en la providencia de Dios para este 25 de diciembre nos haga recuperar a la sagrada familia con la encarnación del mesías. La familia lo es todo y en ella está puesta la esperanza. El Sínodo fue la respuesta para impulsar a la familia, el trabajo pastoral va a exigir un compromiso más noble de los agentes y como pieza fundamental, la docilidad de las familias para aceptar los dones de Dios.
El sínodo representó sólo el instrumental, la iglesia será la parte motora para aplicar dichos instrumentos y el beneficio lo recibirá la familia, por ello es bueno orar, entrar en ayuno, penitencia para que la resistencia de sus miembros la haga rodar el espíritu santo.

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