EL ARCA DE LA ALIANZA

"Muchos se preguntan por el destino del Arca de la Alianza y sueñan con encontrarla, pero aquella Arca era imagen y figura del Arca de la Nueva Alianza. ¿Cual es este Arca? El Arca que los israelitas fabricaron en el desierto por mandato de Dios, contenía las Tablas de la Ley, el Decálogo entregado por el Señor a Moisés en la cima del Sinaí. El Arca de la Nueva Alianza es María, la Madre de Dios. Ella llevando en su seno al Hijo de Dios, al Verbo encarnado, es la verdadera Arca, no hecha por manos de hombre sino por Dios mismo. Si aquella contenía la Palabra de Dios, las diez palabras divinas, escritas sobre piedra, la nueva Arca, María, lleva en su seno la Palabra de Dios hecha carne, Jesucristo. El es la palabra eterna del Padre, pues al nombre de Jesús toda rodilla se doble en el cielo, en la tierra y en el abismo, y toda lengua proclame que Jesucristo es Señor para gloria de Dios Padre. La Palabra se hizo carne y acampó entre nosotros. Jesucristo es el Verbum dei, Verbum domine. No se nos ha dado otro nombre, otra palabra, por la que ser salvos. Por ella se hizo todo. Es el nombre del nuevo Adán, pues si por el Adán primigenio todos hemos heredado la ruina, por el nuevo Adán, todos alcanzarán la restauración. Dios ha hablado definitivamente en su Hijo, El es expresión del ser de Dios, su Palabra. Jesucristo es el cumplimiento perfecto de los Diez Mandamientos. No he venido, dice el Señor, a abolir la Ley, sino a darle cumplimiento. El es el arquetipo del Hombre perfecto, del hombre reintegrado, del hombre redimido y devuelto al estado de gracia original. María es pues la hermosa y bella Arca de Dios. Aquella que llevó en su seno su Ley encarnada. La que guardando la Palabra de Dios en su corazón, mereció llevarla también en sus entrañas y darla a luz para todos los hombres. P. Alonso"